Querido cartero.ㅤ ⸺ BUNNY

໒꒰՞ ܸ. .ܸ՞꒱ა ㄧ 010 !

¡ Kenny !

∑(๑ºº๑)!!

Miraba y miraba por la ventana pero seguía sin entender el porqué su hermana se quedaba hablando con su amigo Butters, o mejor conocido como el cartero, fuera de su casa.

— ¡Karen nos vamos! .– llamo su madre desde dentro de la casa.

Hoy era el día que se iban de acampada aunque fuera una noche. Las madres aprovecharon que mañana no tendrían clases sus hijos y así poder hacer la acampada hasta la noche.

— Vaya.. .– Dijo algo deprimida ya que se quedó a medio contarle algo al cartero hasta que volvió a escuchar a su madre .– ¡hasta mañana!

Se despidió del cartero con mala cara quien le decía que no pasaba nada y que podría contarselo otro día. Aprovechando Kenny que ahora tardarían un poco más para arreglar a Karen, salio de la vivienda. Le agarro el brazo a Butters quien ya se iba porque su trabajo había finalizado.

— ¿Desde cuando tú y mi hermana sois tan amigos?

Butters casi se cae por aquel estirón que le dio Kenny en el brazo para impedir que se fuera. Se sobrepasó, solo estaba caminando, ni que fuera a empezar a correr o a huir. De todas maneras, ¿de dónde sacaba la fuerza si comía lo mínimo de comida? Y algún que otro waffle que le compartía su hermano mayor.

— Bueno... .– torció la sonrisa desviando la mirada .– últimamente hablamos un poco..

Claro que no le iba a decir que se preocupaba de su hermana por culpa de aquellas cartas. Butters daba por seguro (o casi seguro) que solo trataba de burlarse de él y ya sabía que las cartas que leyó eran suyas. Pero quien sabía, siempre cabía la posibilidad de que Kenny no supiera de aquello.

— Siempre te espera en la ventana para hablarte.

— Oww .– pensó enternecido por la imagen de aquella pequeña esperándolo para contarle alguna tontería.

Kenny lo miraba mal, no quería un "aw" el quería que dijera que mínimo eran amigos. Pero pasaba, porque sonaría como hermano protector que no quiere que su hermana tenga amigos de distintas edades. Kenny no era así, es más le daba completamente igual aquello. Solo se lo preguntó a Butters como una pequeña "broma" y para saciar su curiosidad. Respecto a su curiosidad, luego pensó que se le haría más raro ver a cualquier otro de sus amigos siendo amigo de su hermanita.

— Bueno da igual, solo fue raro...

Iba a continuar hablando hasta que un grito de su madre se escucho otra vez dentro de aquella casa.

— ¡¡Kenny, si llamo a tu hermana no es para que tu salgas ahora!! ¡Vuelve aquí!

Entro pero no sin antes despedirse con aquel movimiento de mano de aquel cartero. Kenny más que hablar era una persona que gesticulaba mucho las manos. También sus expresiones decían mucho de él, pero estas habían que verlas con lupa al ir siempre tan tapado. En eso tenía algo en común con Butters, ellos se podían entender a la perfección con tan sólo una mirada.

!

La acampada transcurrió muy bien, habían roces al principio entre los padres pero acabaron emborrachados y abrazados al final. Respecto los más pequeños, Kyle y Kenny estuvieron jugando con sus hermanos a las cartas. Se lo pasaron genial y se rieron un montón, no por los malos, horrorosos y horribles chistes de los adultos o los más pequeños, sino por sus propios chistes de doble sentido o insultando a algún que otro amigo. Pensar que Kyle no lo consideraba a Kenny un amigo y ahora que sea de sus mejores amigos junto a Stan, había un cambio drástico.

Se fueron a acostar, cada uno en donde le tocaba bajo la luz de la luna. Kenny se pego a su hermana, quien le tenía que dar alguna que otra explicación.

— Ey.. no le has contado a tu ángel guardián de... tu nuevo amigo .– susurro dándole algún que otro golpecito para llamar su atención.

Pareciera que quería saber si o si la razón del porque se había hecho amiga de Butters, pero no era así. Se podía ver a los ojos de Kenny que a Karen le emocionaba haber encontrado un amigo como Butters... entonces, ¿Porque no compartía esa emoción con el? También quiere que le cuente lo que le hace feliz, quiere ser feliz junto a ella. ¿Acaso ya no confiaba en su ángel guardián?

— El debe hacer cosas más importantes, no puede estar al pendiente de mi y salvar el mundo a la vez.

— Pero es tu ángel guardián.

— Ya.. pero no es algo importante eso.

— ¿Sabes? A tu ángel guardián le gustaría saberlo si a ti te hace feliz.

Una pequeña risa burlona escapo de los labios de un canadiense interrumpiendo aquella escena tan bonita. Rápidamente, al notar aquel sonidito producido por su boca accidentalmente, se tapo hasta arriba simulando que estaba totalmente dormido.

Los dos hermanos, con alguna pizca de vergüenza en sus mejillas, miraron la luna por última vez para cerrar los ojos con fuerza y tratar de dormir.

Solo uno lo consiguió.

Kenny volvió a abrir los ojos a los minutos mirando la luna. Tenia bastante sueño pero era incapaz de dormir. Además que aquella falta de sueño le hacía pensar cosas extrañas y sin sentido.

" Dicen que los muertos se convierten en estrellas. "

Se le pasó algún que otro recuerdo. Pensó en todas las personas que perdió, luego pensó en sus mascotas y por último pensó en la cantidad de veces que murió. Recordando la última vez, intentando acompañar a Butters a su casa un camión chocó contra el.

" ¿Entonces soy una constelación? Una muy brillante. "

Estaba claro que con todas esas muertes, no merecía tan sólo ser una estrella. El no era ni una galaxia, ni una sola estrella, el era una bonita constelación que brillaba traspasando las hojas de los árboles en un bosque frondoso.

Siguió pensando frases, cada una con menos sentido que la anterior, hasta que finalmente el sueño le ganó. Pensando por última vez en el día con una bonita sonrisa en su rostro:

" Gracias, Butters. Gracias por traerle tanta alegría a mi hermanita con tan solo ser tu amiga. "

¡