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Capitulo 16: Rusia.

DARCY

Cuándo desperté Simon estaba dormido, la cara contra la almohada mientras su brazo derecho estaba sobre mis caderas. Pensé que se iba a despertar pero a penas se movió cuando salí fuera de la cama. Miré la hora en mi telefono, eran a penas las seis de la mañana. El maldito Jetlag me estaba jodiendo.

Me puse los jeans, mi camiseta mis botas y cogí mi chaqueta deslizándome lejos de la habitación. Caminar por las paredes verdosas y los pasillos silenciosos hizo que me abrazara a mi misma después de subirme el cierre de la chaqueta y ponerme la gorra. No conocía para nada esta base, siempre la había evitado venir cuando Price lanzaba la idea. Ni si quiera era por Chris, era porque mi papá pasaba la mayor parte del tiempo en este lugar.

Me detuve fuera de la sala de reuniones donde habíamos estado hace un rato, había un mural con fotos, notas y algunas cosas que ponían ahí. Habían fotos de varios grupos de escuadrones, el de mi papá era uno de ellos. Pude identificar a Price, König, Chris y Ghost, los demás eran todos desconocidos para mí. Chris estaba más joven y sonreía estrechamente.

No pude evitar sonreír.

Y fue cuando escuché que alguien gemía despacio y que los sonidos venían de la puerta detrás de mí. Arriba de las puertas dobles decía con grandes letras "Gimnasio" Decidí empujar la puerta con cuidado y al asomar la cabeza vi al final del gimnasio a Chris, haciendo pesas mientras el humo salía extendido por sus labios. Terminé de entrar por completo, metiendo las manos en mi chaqueta mientras él me miraba y sonreía al mismo tiempo.

―¿No puedes dormir pequeña, rubia?― dejó las pesas y se quitó el cigarrillo de los labios expulsando el humo, negué con la cabeza mientras me acercaba a una distancia prudente de él ―.

―Tú tampoco, por lo que veo y no soy rubia ―.

Chris encogió los hombros riéndose con una ceja alzada.

—Oh, eso lo sé — y se tiró al suelo, con ambas manos empujándose hacia arriba y hacia abajo. Sus quejidos hacían que apretara los muslos inconscientemente. Mientras subía y bajaba apoyando las palmas de sus manos en el suelo como la punta de sus pies ―Si dormí, pero no tanto ― murmura entre quejidos ― ¿Quieres subirte como en los viejos tiempos? ― una risa sarcástica se escuchó de sus labios y me fue imposible no reírme de vuelta, pero antes de que negara con la cabeza estaba sentándome en su espalda cruzando las piernas y los brazos, Chris comenzó a subir y bajar ― estás más pesada ― bromeó y gruñí entre dientes mientras él seguía subiendo y bajando conmigo ― ¿Cuándo ha pasado, eh? ―.

―Seis años ―.

―Seis años ― murmuró ― Lo tuyo con Graves no funcionó muy bien, supe ― rodee los ojos y gruñí de nuevo ― oh vamos, te dije que no confiaras en él ―.

―No quiero hablar de él ― susurré con un resoplido ―.

―¿Entonces de qué quieres hablar? ― Chris se calló un momento pero sabía hacia donde quería ir ― ¿Vas a contarme desde cuando tú y Riley se acuestan juntos? ―.