One-Shots de Miércoles Addams

Defecto

Tn es un velocista y un chico muy popular, se preparaba siempre para participar en las carreras y aunque era muy trabajador, durante la época de vacaciones donde no había nada, se encontró con ciertos problemas. Tenía que descansar una semana para que su cuerpo recobrase toda la energía que había gastado durante las pruebas y competiciones.

—Hola Tn—saludaban algunas personas mientras este devolvía el saludo.

Sin embargo, su mirada estaba posada en ambas compañeras de habitación. Enid y Miércoles, podía parecer egoísta pero le gustaban las dos, si, las dos. Él deseaba estar con ambas pero las chicas ya tenían pareja, aunque se rumoreaba que estaban mal con ellas por el desgaste del enamoramiento rápido, ¿quién lo sabía?, solamente ellas.

Tn recién había empezado a beber un poco de alcohol, no era nada malo, solamente un poquito pero pronto se convirtió en un hábito hasta tal punto que le afectaba. Necesitaba beber y beber para olvidar todo el mal que le producía aquel enamoramiento. Era de las pocas cosas, por no decir la única que le hacia olvidar todo lo malo.

—¿No cree que ha bebido demasiado?—preguntó el camarero.

—No, sirva otra—respondió este.

A pesar de las dudas, este lo hizo y cuando Tn sintió que no merecía la pena seguir bebiendo, pagó y se marchó en taxi. Al llegar, se sentía con fuerzas a pesar de todo el alcohol ingerido así que fue hasta la habitación de las chicas, abrió la puerta ante la sorpresa de ellas y  comenzó a gritar lo mucho que las quería a las dos, que estaba harto de fingir más. Miércoles intentó reducirlo pero ante su sorpresa, logró esquivarlo.

—Eres...eres la mujer más fría y bonita que he visto—luego miró a Enid—y tú, la mujer más amable y resplandeciente.

Sin duda alguna estaba borracho pero no paró de decir cosas de ellas hasta que cayó sobre la cama y se quedó dormido durante un par de horas. Cuando despertó, aún tenía la borrachera y continuó durante un largo tiempo hasta que su mente se nubló.

A la mañana siguiente, al despertar con un pequeño dolor de cabeza, se vio en la cama de ambas. Abrió los ojos mucho, se fijó en que las dos estaban desnudas, y él también. Poco a poco los recuerdos le vinieron. Después de confesarse, besó a ambas y se fueron desnudando. Rojo y algo avergonzado, intentó marcharse pero ellas lo agarraron obligando a estar en cama más tiempo junto a ellas.

Durmió largo rato hasta pasada la entrada de la tarde, se levantó y estaba sólo. Enid le dejó una nota que habían ido a comprar. Este se dio una ducha, comió bastantes platos llenos de calorías y luego se fue a descansar a su habitación.

—Estoy agotado—dijo.

En la noche, ellas acudieron a su habitación y le confesaron sus sentimientos para su sorpresa, pero a cambio debía renunciar a la bebida a lo que este aceptó salvo en las victorias.

Después de eso, Tn entrenó muy duro, tenía las energías a tope y se sentía con mucha fuerza para enfrentar a cualquier enemigo. Ellas ya habían roto con sus parejas, quedaron bien pero ahora estaban enfocadas en animar a Tn quien saludaba o recibía una botella de agua por parte de ambas. Incluso Cosa animaba al joven.

En está ocasión el alcohol fue la solución para su problema pues le dio ese animo a hacer algo que nunca pensó en hacer, confesarse a las chicas. Pero entendía que no era la solución siempre y que debía tratar de mantener los pies en el suelo. Con ellas, seguramente lo lograría.

—¡Ánimo!—gritó Enid con su sonrisa.

—Es hora de seguir entrenando—dijo empezando un sprint en el circuito.

Fin.

Lamento que sea algo corto pero he querido plasmar el pedido. Aunque abre la puerta a otros tipos de historia en el tema de actividades extraescolares.