Sintiendo tu Corazón

Capítulo 2: Adrián

16:30 de La tarde, 13 de septiembre.
Estaba hablando con Noelia y Ana por WhatsApp y les dije de quedar esa misma tarde para ir a la feria. Ellas aceptaron mi propuesta y yo, ilusionada por salir como siempre, me dirigí a darme un baño. Aunque habíamos quedado a las siete, a mi me gustaba bañarme mucho antes porque siempre me relajaba y tardaba mucho, así no me retrasaría.
Abrí el grifo del agua caliente y mientras la bañera se llenaba, yo elegí qué ropa me pondría. Siempre me gustaba ir arreglada a cualquier lugar y por ese mismo motivo, tardaba mucho en elegir.
Me bañé y al cabo de un rato empecé a peinarme. Ese día mi pelo tenia un brillo especial, me veía mucho más guapa, estaba alegre.
Cuando me vestí y terminé de arreglarme, consulté la hora. Faltaba poco para las siete y extrañamente, ellas no habían llegado aún. Era extraño, sabiendo que siempre habían sido muy puntuales. Estuve esperando un buen rato, y nada. No llegaban. Luego las llame y me lo cogieron, note risas en el lugar donde se encontraban y Ana me comunico que su hermana tenia fiebre, así que no vendrían. Sospeche que estaban con la que había sido mi mejor amiga, Isabel, y con la otra niña por la que me había dejado tirada, Sofía.
Me enfadé muchísimo y me sentí muy triste al saber que me habían dejado tirada, y sobretodo por ellas.
Así que en un arrebato de rabia decidí que iría a la casa del chico, que por aquel entonces me gustaba. Me negaba a quedarme encerrada en mi casa.
Bajé la calle con nervios a que me rechazara o a que no estuviera.
Toqué el timbre de la casa y salio su padre.
Le dijo a Adrián que saliera y entonces hablamos. El no estaba muy seguro de si venir o no pero al final aceptó. Quedamos a las nueve en su casa y así fue. Volví a mi casa y mi madre pregunto a donde había ido. Entonces le respondí que me iría con Adrián a la feria. Ella río pero a mi me daba igual, yo estaba nerviosa y lo demás no me importaba mucho.
Llegaron las nueve y Bajé la calle para ir a su casa. Al tocar la puerta ahí estaba él, muy arreglado y muy guapo.
Íbamos charlando y le comuniqué que ya no me venía en el siguiente curso puesto que iría a otro instituto.
Cuando llegamos a la feria, recibí un WhatsApp de mi padre preguntando si él había llegado y se lo confirme.
Nos subimos en una de las atracciones y vi en su cara la felicidad reflejada en su sonrisa.
Mientras estábamos en la feria, los chicos con los que ayer estuve, empezaron a mandar mensajes a través de un grupo.
Yo me sentía muy feliz, sobretodo porque estábamos cada vez más cerca y nuestras manos se rozaban continuamente.
Vimos a mucha gente, entre otros, algún que otro primo mio y unos chicos del instituto que nos decían que hacíamos buena pareja y preguntaban si estábamos juntos.
Llegamos a una de las fuentes a beber agua y vimos a mis primos pequeños, a dos de ellos, y a su madre. Nos saludaron y nos fuimos.
Llegaron las doce, y ya me tenía que recoger. Él me dio un beso de despedida y mis padres llegaron.
Había sido el mejor día de toda mi vida