19:00 de la tarde, 31 de Octubre.
Llegué a la confirmación esperando a que Aurora saliera para hablarte con ella. La vi y le pregunté si iba a por ella a su casa y así iríamos a la mía-donde se situaba la fiesta- juntas.
Ella me dijo que prefería ir ella por su cuenta porque Quizás tenía que hacer algo.
Mi catequista- Ruth- me dijo que entrara a la iglesia y eso hice, la seguí. Allí estaban casi todas mis compañeras de confirmación. Empezamos a rezar en cuanto el párroco llegó.
Después de rezar, nos fuimos a la sala donde solíamos dar catequesis.
Yo no hacia más que mirar la hora para poder Irme rápido y no llegar tarde a mi propia fiesta. Pero ese día Ruth se demoraba como no lo había hecho antes. Yo estaba cada vez más y más nerviosa hasta que por fin pudimos irnos.
Bajé las escaleras corriendo y salí rauda de la iglesia. Mientras aligeraba para llegar a mi casa vi a mi prima Claudia que iba con un amigo suyo. No podía pararme a charlar así que simplemente le dije adios.
Cuando llegué a mi casa, ya estaban allí Ana y Noelia. No estaban disfrazadas y se negaban a ello.
Subí las escaleras que se dirigían a mi habitación y me puse rápidamente mi Disfraz de esqueleto. Este disfraz era negro, con el dibujo del esqueleto de color naranja. Tenia una capa y un sombrero de copa. Este disfraz me lo había regalado mi yaya- abuela materna - años atrás.
Cuando estaba pintandome, recordé que debía ir a por Christina y Diana. No me daba tiempo así que no acabé de pintarme y salí corriendo en busca de ellas.
Christina estaba esperando en el coche de su madre y hablamos un rato para hablar sobre la hora en la que acabaría y tal mientras Diana llegaba. Cuando llegaron fuimos a mi casa y Christina me pidió un sitio para disfrazarse. Diana venia vestida con un peculiar traje de calabaza, venía muy mona.
Mientras Christina se vestía y esperábamos a Aurora, yo me fui a mi habitación a terminar de maquillarme. Se me cayo el estuche de pintura de mi madre y lo rompí, intente disimularlo.
Mi madre me dijo que Aurora había venido y ella me dijo que la ayudará a disfrazarme. Había elegido el vestido de una cabalgata para disfrazar de vampira y mientras la maquillé.
Cuando terminamos, las demás ya habían puesto la comida en la mesa y tal.
La fiesta transcurrió con música y riendo. Mientras, Aurora se caía jugando con mi hermano al fútbol, porque su vestido era muy largo.
Luego empezamos a imitar a profesores y así estuvimos hasta que ya no quedaba nadie.
Una buena fiesta de Halloween.
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Sintiendo tu Corazón
RomanceEs una historia basada en hechos reales en los que contare mis sentimientos y experiencias vividas. Contendrá frases y poemas. Que lo disfrutes!