🌟 ; Contenido +18.
🌟 ; Traducción de oneshots.
🌟 ; Ninguno de los personajes o oneshots me pertenece, créditos totales de la obra a quanticdreams y de los oneshots a historias encontradas de Tumblr o AO3.
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Te acostaste en tu cama mientras la música sonaba a todo volumen, lo que hacía que las paredes vibraran silenciosamente. En noches como ésta sientes que tu cuerpo te traga lentamente en la cama, permitiendo que tu cabeza descanse sobre la almohada. Por un momento, te pareció antinatural estar así de tranquila.
Te sentiste exhausta cuando un aliento tembloroso escapó de tus labios. Te quedaste mirando al techo sin expresión alguna; la música era lo único en lo que te permitías concentrarte. Era una de esas noches, el tipo de noche en la que todo rápidamente sobrecargaba tu mente.
El trabajo era estresante y la universidad bombardeaba tu cerebro con tareas y ensayos. Sin mencionar que las cosas en tu vida no parecen estar de tu lado últimamente. Hoy no obtuviste el ascenso que te prometieron, llegaste tarde a clase y te perdiste un examen vital.
Suspiraste molesta, girando tu cuerpo hacia un lado, mirando a la pared.
Odiabas sentirte así, sin esperanza. Entendiste que vendrían días malos y que con el tiempo llegarían los días buenos. Pero siempre te quedaban pensamientos de ¿qué pasaría si los buenos días nunca volvieran exactamente? Incluso hoy parecía el peor día del mundo, pero con el tiempo cambiará. Tu cuerpo había comenzado a sentirse denso contra tu cama; Suspiraste ante el enorme pensamiento que surgía en tu cabeza como una gran nube gris. Lentamente moviste tus dedos sobre la pared mientras sentías la textura crujiente y fría contra tus yemas, usando tus dedos sin pensar para hacer pequeños círculos.
Como un reloj, escuchaste la puerta principal abrirse y cerrarse silenciosamente con un pequeño 'click'. Olvidaste lo tarde que era. Por lo general, no estabas despierta cuando él llegaba a casa. Pero, incluso si ese no es el caso ahora, no querías molestar a tu compañero de cuarto. Te sentías demasiado ridícula para acercarte a él por cómo te sientes ahora.
Tu compañero de cuarto no era una persona cualquiera. Para empezar, era un androide. Y no sólo un androide, un detective del Departamento de Policía de Detroit. Ahora bien, no eras el tipo de persona que discriminaba a un androide o se negaba a la 'protección' de alguien del departamento de policía, así que tampoco te molestaba demasiado que alguien así compartiera un apartamento contigo, pero te tomó un tiempo acostumbrarte.
