Dentro de ti

Capítulo 4: La sombra

A lo largo de estas páginas, he mencionado en varias oportunidades la sombra, pero como sabrá, su inconsciente sigue trabajando y por tanto, es muy probable que la información sobre ese término, ya ha quedado relegada en lo más profundo de sus ideas, pero no se preocupe, lo que realmente importa, es aceptar que no tiene el control de su inconsciente y tras ello, su mente consciente tendrá presente lo que significa el inconsciente, lo que se convertirá en el primer paso para tratar con esta parte de su mente que hasta ahora, es un lugar casi inexplorado para usted.

Entonces, repasemos lo que sabemos de la sombra. Esta sombra fue identificada por Carl Jung y se trata de todos aquellos pensamientos sean positivos o negativos, que quedan olvidados en nuestra mente inconsciente y acá, muchos pueden tener la duda sobre esta parte de su mente, después de todo, no es muy sencillo aceptar que algo dentro de usted existe que ni siquiera puede sacarlo a relucir y para ello, lo invito a leer nuevamente el ejemplo que cité de la casa en el capítulo 1, pero en todo caso, a continuación le compartiré otro ejemplo más corto y sencillo que puede poner en práctica de inmediato.

Sea consciente de su inconsciente

Acá haremos un repaso simple para que pueda interactuar con su inconsciente y para esto, necesita sacar algunos de sus recuerdos a flote. Piense en su primera mascota, un perro, un gato, un loro, un pececito, cualquiera. Recuerde su nombre, las veces que pasó tiempo con ella, la alegría que le daba. Seguramente ahora que le he pedido que la recordara, no tuvo ningún problema en acordarse de varias anécdotas vividas con ella.

En caso de que no haya tenido mascota, recuerde su primeros días en el colegio, las primeras veces que se encontró rodeado de tantos niños de edades parecidas a la suya. Cuando tenía que cantar el himno de su país, sacar sus cuadernos en clase, escribir y hacer tarea. Tal y como el ejemplo de la mascota, pudo acordarse de eso y este ejercicio puede aplicarse a cualquier cosa en su vida, como lo sería su primer beso, su primera pareja o cualquier recuerdo de lo que usted desee.

Verá que podrá pensar en todas esas experiencias con mucha o poca claridad, pero las recordará y es acá, en donde debe tener presente que es muy probable que antes de leer esto, tenía cualquier cantidad de tiempo sin sacar esos recuerdos a flote, es decir, es probable que no haya pensado en esas vivencias esta mañana, ni ayer, ni en meses, ni prácticamente en ningún momento, pero apenas le pedí que las recordara, no tuvo problemas en hacerlo. Eso se debe, a que a esa información yacía en su inconsciente y con solo buscar ese recuerdo, pudo regresar a su consciente.

Debe tener presente que todo esto que estamos haciendo, no hará que su inconsciente deje de ser inconsciente, pues es imposible que pueda ser consciente en todo momento de todo lo que ha vivido a lo largo de su vida, pues ello conllevaría a que siempre tenga presente recuerdos de sus mascotas, estudios, partidos de fútbol y cualquier vivencia, lo que saturaría su mente. Es por ello que nuestro inconsciente se encarga de almacenar esa información de forma que podemos disponer de ella siempre que la necesitemos sin la necesidad de que esté presente en nuestro consciente, lo que dejará espacio para enfocarnos en lo que estamos haciendo actualmente.

Sin embargo, dentro de ese inconsciente, en lo más profundo, se encuentra una parte de nosotros que puede ser increíblemente peligrosa y se trata de la sombra.

En lo profundo de nuestro inconsciente, yace la sombra

Ahora sabe que la información que se guarda en su inconsciente no es de tan fácil acceso, ya que necesita saber exactamente qué es lo que está buscando para dar con ello o de lo contrario, simplemente le abordarán ideas, pensamientos y sensaciones aleatorias, pero más allá de todo eso, mucho más profundo, se encuentra una parte de usted que incluso le es menos familiar que su inconsciente y por ende, guarda incluso más información que podría edificarlo como persona, pero a la par, podría terminar de destruirlo y lamento decirle, que en la mayoría de los casos, sucede el segundo escenario y entiendo su negativa a creer que algo así podría pasarle a usted, después de todo, tiene la sensación de que puede controlar enteramente su vida, pero como ya le mencioné, eso es solo una ilusión que en cualquier momento se derrumbará y solo basta que las cosas empiecen a salir mal para que pierda el norte.