✓ 𝗜 ♡ L'oceano E Le Torte ( 𝗁𝗒𝗎𝗇𝗅𝗂𝗑 )

ㅤׁ✧𓂃 diciotto

Felix se encontraba en la cocina preparando una rica cena. De fondo se podía escuchar un viejo vinyl de ricchi e poveri, con la música escuchándose de fondo débilmente.

Felix tarareaba las canciones mientras revolvía los ingredientes de la rica pasta que preparaba, el pollo relleno estaba en el horno y los vegetales cocinándose.

Un Hyunjin cansado volvía del puerto, fastidiado por el exceso de trabajo y su nueva tarea de conseguir especias que Felix le encargó.

Detestaba la idea de equivocarse y arruinar el trabajo ya hecho de su omega. Suspiró cansado sin saber como diferenciar el queso pecorino del parmesano, ni siquiera sabía si el apestoso queso en sus manos era parmesano.

—¡hey, Hyunjin!

Hyunjin rodó los ojos fastidiado y al voltear se encontró con un Jeongin sonriente con una botella de vino tinto en sus manos y una canasta metálica de la tienda en sus manos, dentro de esta había quesos y carnes frías.

—hola, Jeongin. —la voz fría e indiferente de Hyunjin pasó desapercibida para Jeongin quien solamente se alegró de haber tenido un saludo por lo menos del amargado alfa.

—¿buscas quesos? Yo también, tengo una cita y realmente quiero impresionarlo con mis habilidades culinarias.

—¿sabes de quesos?

—estudie gastronomía, trabajo en un restaurante importante en la ciudad continua.

Hyunjin gruñó para sus adentros pero suspiró rendido.

—¿podrías ayudarme?

—claro, amigo. —el optimismo impecable de Jeongin hizo sentir mal a Hyunjin quien suspiró cansado.

—no se que queso es el que Felix me pidió, quería un pecorino pero lo único que puedo ver son bolas apestosas de leche. —Hyunjin hizo una mueca y olió el queso asqueroso en su mano.

—amigo, ese es un burrata así que estás muy lejos. —rió Jeongin.

—no todos tuvimos la oportunidad de ir a escuelas caras, amigo. —el tono ácido en las palabras de Hyunjin hicieron sentir mal a Jeongin quien solo carraspeó.

—p-perdón.

Hyunjin suspiró y dejó el queso en su lugar. —lo siento, yo soy el que está teniendo un mal día y solo quiero llegar a mi hogar.

Jeongin le dio una sonrisa comprensiva y tomó un queso de la primera fila y lo puso en las manos de Hyunjin, después tomó uno que estaba a la mera esquina de la mesa poniéndolo en la mano de Hyunjin.

—Felix adora el queso caciocavallio, también lleva un jamón serrano porque lo adora a morir.

Hyunjin asintió y sonrió.

Vio la canasta de Jeongin.

—ese omega se sorprenderá mucho con un alfa que le de mermelada de uva en su cita.

—no es un omega. —las mejillas de Jeongin se calentaron al recordar al lindo alfa con pestañas largas y ojos color miel. —fue difícil convencerlo, pero perseguirlo por dos días seguidos y recibir un golpe con un pez valió la pena.

Hyunjin soltó una carcajada al imaginar a Jeongin siendo golpeado por un pez.

Y tal vez sintió un poco de alivio al saber el gusto del alfa por los alfas.

—aún no puedo creer lo antipático que eres al principio. —Hyunjin frunció el ceño. El alfa se encontraba viendo la las botellas de vino, comparándolas entre sí. —Felix hablaba de ti en las cartas como si fueras un ángel caído del cielo.

Las mejillas de Hyunjin se pusieron calientes al instante y alfa se emocionó. —¿h-hablaba de mí en sus cartas?

Jeongin bufo riéndose. —yo ya no aguantaba una semana para poder saber que tantas cosas hacías por él, era como leer una novela romántica, especialmente por la forma en que Felix te describía.

—¿cómo me describía?

—pregúntaselo a él. —rió Jeongin.

Después de unos minutos los dos abandonaron la pequeña tienda con un Hyunjin feliz de poder llegar a su hogar.

Felix tarareaba al ritmo de sara’ perche ti amo, disfrutando del momento y sintiéndose feliz al saber que Hyunjin había llegado pues el sonido de sus pesadas llaves se escuchaba.

Un gemido de Hyunjin se escuchó y Felix rió al saber que era por las suaves pantuflas que Hyunjin amaba tanto.

—ma dopo tutto, che cosa c’è di strano, è una canzone, sarà perché ti amo… —Hyunjin dejó un beso en la mejilla de Felix y cantó en su oído alejándose rápidamente.

Dejó los quesos al lado de Felix quien sonrió al ver el jamón serrano.

—¿escribías de mí en tus cartas? —el tono coqueto en la voz de Hyunjin hizo sonreír a Felix.

—obviamente, alfa tonto. Tenía que contarle a Jeongin acerca del alfa más lindo que había conocido en mi vida.

Hyunjin sonrió y se acercó a Felix tomándolo de la cintura.

Los dos estaban en la cocina, disfrutando del delicioso olor de la cena de Felix y la tenue luz que entraba por la ventana de la cocina sabiendo que el sol ya se estaba escondiendo y el tenue color naranja en el cielo aparecía.

Las manos de Hyunjin estaban en la cintura de Felix y las manos de Felix descansaban en los hombros de Hyunjin, empezaron a bailar con la melodía alegre de ricchi e poveri.

—se cade il mondo, allora ci spostiamo,
Se cade il mondo, sarà perché ti amo… —la voz suave de Hyunjin hizo reír a Felix porque sus labios rozaban suavemente con la oreja de Felix.

Continuaron bailando en la cocina mientras la cena se preparaba y el sol se escondía.

Con la risa de Felix llenando el lugar y el corazón de Hyunjin creciendo por la felicidad de poder escuchar a su amado.

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©larrylarrylarrysoft

Gracias por leer.