Jueves— Bien, Shinso, ya puedes salir! — elevó la voz una pelicastaña, bastante emocionada la verdad.
— Esto es estúpido — la expresión de molestia en el rostro del más alto era notable, pero lo era aún más el hecho de lo bien que le quedaba el traje.
— Whoaa — no fué sólo Kendo la que lo dijo, sino también las demás féminas del aula 1-B. Embelesadas, no prestaban atención a sus otros compañeros, que hacían el mismo acto de mostrarse en traje de vestir.
— Oigan, también estamos aquí! — se quejó Monoma, molesto de que no le presten la debida atención que "se merecía" por el mero hecho de existir.
El rubio mostraba las mejores poses que se le ocurrían, obstaculizando la vista de las chicas, quienes fastidiadas, le gritaron un sonoro "Lárgate!". Para acto seguido preguntar— Shinso-kun, puedo tomarte una foto?
— Shinso-kun, me dejas grabarte?
— Shinso-kun, te queda espectacular!
— Shinso-kun, ahórcame!
Todos callaron al escuchar el último comentario, nadie supo quién lo dijo (tampoco se animaron a repetirlo), pero mentalmente concordaron con esa petición y asintieron.
— Me largo — espetó con molestia el pelimorado.
Mentiría si dijera que la atención recibida fué desagradable. Pasar de ser el chico solitario a quienes todos (incluso sus compañeros) evitaban, a ser el centro de atención, no le molestó en absoluto.
Ya quería ver la reacción que tendrían los demás estudiantes al verlo en el festival, y con suerte, también obtendría una de Izuku.
Estaba emocionado, algo nuevo dentro de él se sentía satisfecho.
Quién diría que se trataba de la verdadera naturaleza de su lobo. Uno arrogante, seguro de sí mismo, y en su demasía dominante.Después de volver a sus uniformes correspondientes, las clases transcurrieron de forma normal. Todo bien hasta la hora del almuerzo, donde Shinso se sintió abrumadoramente observado.
Ojeaba de forma discreta hacia todos lados, encontrándose a cada dos metros con chicas que al momento de hacer contacto visual con él, apartaban deprisa la mirada.
Con una mirada de pocos amigos, arqueó una ceja confundido y molesto, quizás estaban hablando mal de él. No era nada nuevo, sin embargo no lograba acostumbrarse del todo.
Dejando de lado esos pensamientos, buscó el mejor lugar para sentarse a almorzar. Vió que en una mesa casi vacía se encontraban algunos de sus compañeros de clases, los más calmados para ser exactos, por lo que se dirigió allí, procurando la mayor distancia posible de ellos para no incomodarse ni incomodarlos. Debido a la ansiedad social, no se percató que tomó asiento frente a la mesa de Izuku.La comida olía apetecible, bastante en realidad. En plena ingesta de sus alimentos, oyó cómo se aproximaba un grupo bullicioso de amigas. No le interesaba quiénes eran, sólo esperaba no se sentaran en su mesa.
— Shinso-kun! Podemos comer contigo? — preguntó alegremente una peliverde llamada Tokage Setsuna.
El cuestionado levantó la mirada irritado, (ya ni comer tranquilo podía), encontrándose con un grupito ruidoso de 7 integrantes que se encontraban frente suyo. En su mayoría eran mujeres Beta, a excepción de un chico Omega que no conocía. En realidad, sólo conocía a sus compañeras de clase, Tokage (Beta), Komori (Beta), Kendo (Alfa) y Yanagi (Omega). Las demás, vaya a saber Dios quiénes eran.
— Acaso no hay más mesas? — preguntó para desviar la vista y seguir comiendo.
— Mmm, de hecho, no. Así que estás de suerte! — con toda la confianza del mundo, sin previo aviso ni permiso, se sentó junto a él.
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Obedéceme (ShinDeku) Omegaverse
Fanfiction"Lavado de cerebro", el nombre de un quirk bastante inquietante. Bueno, para algunos, porque a Midoriya Izuku le llamaba de sobremanera la idea de ser controlado y estar a merced del otro. Obviamente nunca lo admitiría ni a él mismo y mucho menos a...