"Lavado de cerebro", el nombre de un quirk bastante inquietante.
Bueno, para algunos, porque a Midoriya Izuku le llamaba de sobremanera la idea de ser controlado y estar a merced del otro. Obviamente nunca lo admitiría ni a él mismo y mucho menos a...
Espero no te arrepientas después, Midoriya — mencionó con una sonrisa juguetona a la vez que elevaba su pelvis bruscamente.
— Shi-Shinso-kun!? — al responder, perdió el control de su cuerpo.
— Levanta — ordenó con su quirk a la vez que tomaba nuevamente las caderas temblorosas del pequeño — después de ésto no escaparás de mí, Izuku~ — mencionó seductoramente. Sin poder evitarlo, el peliverde se excitó aún más al escuchar su nombre siendo pronunciado con una voz tan grave y erótica.
Shinso estampó su boca en las redondas y firmes posaderas del contrario, mordisqueando y masajeando sin pudor alguno. Contorneaba con sus manos la fina cintura a la vez que lo acercaba aún más. Metía y sacaba su lengua, la movía en círculos y la volvía a meter más profundo. No sabe exactamente cuántas veces imaginó con hacerle eso al peliverde, lo único que puede afirmar, es que disfrutaría todo lo que pudiera. ( Momento en que no sabes si ser Izuku o Shinso )
El juicio y raciocinio del ojiesmeralda abandonaban su mente, al igual que el líquido lubricante lo hacía de su entrada.
— Puedes gemir, no te preocupes. Ya ni siquiera estoy usando mi quirk — se burló a la vez que apretó deliciosamente el miembro de Izuku.
— GAH! N-NO! — la vergüenza lo hizo reaccionar, intentó darse la vuelta lo más rápido que pudo para evitar el contacto de Shinso, pero en ese momento...
— Dije que podías gemir, no escapar — mencionó usando su quirk, una voz grave y un movimiento que inmovilizó al contrario.
El más pequeño sintió cómo su entrada se humedecía aún más.
No lo quiere admitir, pero la sola idea de estar a merced del quirk y la imaginación del más alto, lo hacía querer entregarse por completo. « Después de todo, sólo era la emoción del momento, ¿no? »
El pelimorado empezó un vaivén en el miembro del omega. Lo hacía de una forma tortuosamente lenta que le encantaba al más pequeño. Su líquido pre-seminal no paraba de salir al igual que sus gemidos. Arqueó de forma brusca su espalda al sentir dos dedos entrar en él.
— Mira cómo entraron de fácil — entonces insertó un tercer dedo simulando una embestida, los metió lo más profundo que pudo. Al hacerlo repetidas veces, tocó su punto débil, volviendo loco al peliverde y nublando su vista — Date la vuelta, mírame —
Con toda la tranquilidad y sensualidad del mundo, Izuku se posicionó como el mayor lo ordenó. Shinso no daba crédito a lo que observaba, la imagen y mirada que le proporcionaba el peliverde quedaría plasmada en sus recuerdos para siempre.
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« ¿Cómo algo tan lindo y aparentemente inocente podía ser tan lascivo? »
Izuku notó un extraño brillo en los ojos ajenos, ¿Él también los tendría? Se sonrojó aún más, pero su cuerpo reaccionó por su propia cuenta. Con suavidad, tomó las mejillas de Shinso hasta deslizarlas por su nuca, y lo besó. A pesar de ser lo más inocente que sucedió en ese misterioso espacio cúbico, fué lo que más abrumó al pelimorado. Las emociones recién descubiertas transmitidas a través de cada movimiento bucal, la conexión inexplicable que pudo sentir, y sobre todo, las repetidas palabras de su lobo en su cabeza: « Mío, mío, mío, mío....»
Se separaron lentamente, con un hilo de saliva uniéndolos aún. Sin despegar la mirada, habló siguiendo sus instintos:
— Alfa Hito-
Habiéndose dejado llevar por toda la dulzura de aquel beso, no saben cuánto tiempo pasó, lo único que supieron, fué cuando la caja en la que se encontraban, repentinamente desapareció, causando que ambos cayeran bruscamente al piso.
El menor observó el reloj, percatándose de que había pasado exactamente una hora, ¿Tanto tiempo había pasado? ¿Se quedaron inconscientes mucho tiempo? ¿O acaso el beso duró demasiado? Ahora observaba a Shinso sin saber qué decir o hacer; alterado, se aleja rápidamente con el ceño fruncido. Ninguno de los dos sabe cómo fué que se dejaron llevar.
El más pequeño sentía una mezcla de vergüenza (por todo lo que hizo y se dejó hacer), enojo (por haberse sentido "obligado" a humillarse de esa forma), y confusión (porque, por sobre todas las cosas, todo lo que sucedió, le gustó).
El más alto también era un revoltijo de pensamientos, pero la diferencia constaba en que, no se arrepentía de nada. Más aún porque surgió una extraña emoción en su corazón, un sentimiento de pertenencia, y una conexión que lo dejó intrigado. ¿Qué habría pasado si Izuku terminaba la frase? Seguramente perdería el control. ¿El quirk villano provocó ese ligero destello en los iris del pecoso? ¿Después de ésto, cómo sería la relación entre ellos dos? Y sobre todo ¿Qué era ese sentimiento que no le pertenecía? No tenía ningún remordimiento ¿Entonces por qué tenía un pesar en su pecho?
Salió de su trance cuando notó que Izuku caminaba apresurado detrás de los casilleros (o armarios).
— Mido-
— Vete!
Ahora sí, se arrepentía ligeramente de haber usado su quirk con Izuku. A pesar de quererlo profundamente desde hace tiempo, debió contenerse para no asustar al pobre peliverde afectado por las feromonas. Quería refutarle que él no fué quien empezó todo, sino un suplicante pecoso; pero decidió tragarse sus palabras, para no empeorar la situación. Antes de retirarse, se detuvo y dijo:
— Recuerda lo que dije, Midoriya, que no te arrepientas. Y sobre todo, que ya no podrás escapar de mí.
Habiendo escuchado la puerta cerrarse y los pasos alejarse, exhaló el iré retenido, apoyó su cabeza en el casillero, e hizo el mejor esfuerzo para controlar a su lobo, que le exigía seguir a su alfa.
¿Su alfa?
Buenos días/tardes/noches! (◕ᴗ◕✿)
Primero, les quiero informar que su autora casi fallece en un accidente vial xd
Segundo, el lunes rindo para pasar a mi último año de secundaria, deséenme suerte porfa, sino, se quedan sin actualizaciones permanentes por castigo de mi mamá x'd
Tercero (si es que paso de curso), vuelve la etapa de esclavismo académico. El miércoles vuelvo a clases (escuela técnica encima), hay días que casi no duermo, por lo que pido toda la misericordia posible hacia mi persona por no actualizar rápido.
Cuarto, les gustó el dibujito? Me costó dos horas hacerlo, y según yo, está decente.
Quinto, discúlpenme pero todavía no es tiempo del lemmon, todavía queda mucha más tensión sexual que sufrir c: No quiero apresurarme demasiado en la trama, así lo sabroso se lo siente más (?
Ya saben, no se coman las uñas ni se rasquen mucho cuando estén nerviosos, cuídense mucho ^^
Los quiero mucho, ya son un poco más de 100 personitas que leyeron el fic, les estoy sinceramente agradecida <3 Ana fuera ◖⚆ᴥ⚆◗❤️
