Obedéceme (ShinDeku) Omegaverse

Cap 12 - Festival - Última patte

Estaba preocupado, demasiado para ser sinceros.

Aparentemente, Izuku se tomó el resto del día libre, porque no lo vió desde que huyó corriendo.
Ahora tendría que soportar lo que quedaba del día, fingiendo ser una persona amigable. Únicamente lo soportaba para ver las divertidas y tiernas reacciones del pecoso.

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Pasaron las horas, y de forma totalmente aburrida y tediosa, el primer día llegó a su fin. Por fin obtuvo el respiro que necesitaba, y apenas llegando a su casa, lo primero que hizo fué ducharse y tirarse de lleno en su cama.

Durmió tan plácidamente, que 10 horas pasaron en un santiamén y 3 alarmas sonaron sin que se enterara.Gracias a la última alarma, despertó asustado y confundido, no sabiendo qué día era, ni lo que debía hacer. Revisó su celular, leyendo los mensajes de sus compañeros casi insultándolo por la tardanza que estaba teniendo.
Con toda la flojera del mundo, recalentó la comida que se suponía era su cena de ayer, se lavó, vistió (tratando de verse lo más presentable posible) y salió deprisa, las llamadas no dejaban de molestarlo.

Al llegar ya cambiado con su traje, lo recibió un molesto Todoroki, quién se tuvo que encargar de recibir a las clientas y hacerles "charla". Sin decir palabra alguna, el bicolor le entregó bruscamente la tarjeta que decía "mayordomo principal", cosa que le hizo soltar una pequeña risa al pelimorado mientras ponía la tarjeta sobre la tela de su pecho.
Dejó de lado su acción cuando se sintió extrañamente asustado. No, no era él, era Izuku.
Giró la vista buscando al culpable de su malestar, para encontrarse con el peliverde escondiéndose entre la muchedumbre de clientes, fingiendo no haberlo visto.
Quizás debía dejarlo tranquilo, sólo por hoy. Entendía perfectamente que el día anterior se sobrepasó un poquito.
Le costaría, pero no molestaría al pobre peliverde.

Cada grupo de clientas, una molestia más. No veía la hora de que acabase ese suplicio llamado festival.
En cualquier momento mandaría a alguien al demonio, sobre todo al ver cómo Alfas descarados intentaban dejar su olor en el pecoso, quién no se percataba de ello posiblemente por el uso de inhibidores. Tenía entendido que éstos causaban pérdida temporal de olfato a las feromonas.

Por suerte, tenía puesto el respectivo traje para su primer género, así que no debía preocuparse de que alguien intente sobrepasarse.

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Eran exactamente las 9:00pm del sábado cuando tocaron las alarmas en la U.A, anunciando la finalización del festival anual.
Todos aplaudieron ansiosos, algunos por el alivio de poder descansar y otros felicitando el trabajo en equipo. Pero la mayoría estaban particularmente emocionados por la fiesta previa que se organizaba en cada departamento.
Era la única fecha del año en donde, después de tanto esfuerzo en el festival, se les permitía a los estudiantes descontrolarse un poco, permitiendo bebidas alcohólicas, música y bailes. Siempre y cuando no generaran disturbios, tanto personales como con sus quirks. Nadie nunca provocó un alboroto porque sabían las complicaciones sociales que ésto traería.

Ya en camino al edificio de apartamentos de las clases de héroes, todos conversaban animadamente.

- Uraraka-san, qué vestirás hoy? Yo tenía pensado en el conjunto negro que te mostré el otro día! - contó una emocionada Mina.

- Te quedará pre cio so, Mina-chan! - hizo una pausa - Y sobre lo mío....aún no lo sé, me ayudarías?

- Por supuesto!! Jirou, Tsuyu-chan, Momo, hoy debemos estar DI-VI-NAS

Y así continuó el parloteo femenino, lleno de sugerencias sobre vestuario, maquillaje y los denominados pasos "prohibidos" que usarían para el baile. Mientras que los varones no tenían ningún interés en vestirse de manera extravagante (a excepción de Aoyama, claro), sólo pensaban en divertirse haciendo tonterías mientras bebían y bailaban.