Tú Mi Única Alfa (GL /Yuri)

14. Advertencia

Estaban en el auto de camino a la casa de los padres de Taira, luego de aquel momento todo había sido extraño, ella había buscado todo sobre los Enigmmas, pero lo que había hecho Lorrein sobrepasaba sus creencias, en parte estaba asustada porque Andreu estaba en la misma ciudad que ella y eso no podía ser, Doncella le decía que no debía preocuparse porque ella estaba ya con su Alfa y nadie iba a hacerle algún daño.

Lorrein siente las feromonas incómodas de Taira y King estaba enojado y ella no soportaba sentirse fuera de control, ya estaban por llegar y todo el camino era un silencio incómodo, necesitaba calmarse o rompería el auto, para en seco fuera de la casa de los padres de Taira y la mira fijamente, Taira la mira sabiendo que algo debía de decir pero no quería, si decía algo de Andreu se pondría a llorar y no quería ahora que habían empezado a llevarse bien.

-Tienes que decirme que estás bien -dice entre gruñidos- King está a punto de salir a matar a cualquiera.

-Si... lo estoy -dice algo nerviosa- sólo me sorprendió lo que pasó.

-Eso no es cierto -dice Lorrein tratando de calmarse- Taira...

-Se que si alguien me quiere hacer daño lo puedes matar -la corta tratando de desviar el tema- solo es un idiota.

-Ven necesito tocarte -la acomoda en sus piernas dentro del auto- necesito que calmes a King antes de que mate a todos en el departamento.

-Lore... no pasa nada -dice abrazándose de su cuello- contigo a mi lado estoy bien.

-Te creo -besa su marca calmandose- no tocaré el tema, tenemos otros problemas.

Lorrein guarda esa nota mental, más adelante mandará a buscar todo sobre esa persona, algo le decía que era una escoria que se necesita eliminar, sintiendo a Taira más calmada bajan del auto y suben al departamento donde se encontraban los padres de Taira y los suyos, se preguntaba qué es lo que querían ahora, no habían hablado de nada desde lo ocurrido y ahora su padre les esperaba.

Un escalofrío le recorrió todo el cuerpo a Taira, cuando tocaron y su padre Beta abrió la puerta, le miró la marca expuesta y una sonrisa que más parecía una mueca apareció en su rostro, claro ellas no habían pasado por el periodo de cortejo como todos, lo normal hubiese sido que antes del cambio de Lorrein al menos ella tratara de tener citas o mandarle flores, pero todo ocurrió al revés.

Ingresan a su casa ya todos se veían serios, no parecía que habrían peleado, pero algo había pasado, saludan a todos con respeto y Lorrein estaba en modo protector con Taira, al ingresar el humor de todos le había pegado y no era bueno, por instinto se pone delante de Taira y saludan a todos, Su padre la mira de pies a cabeza y asiente pensativo, su madre sonreía al verla bien y sus ahora suegros al parecer se habían relajado ante su comportamiento, pero no sé fiaba de nadie.

-Mi hija... veo que estás muy bien -dice su madre- eres de las pocas Enigmmas.

-Si, al parecer el cambio estuvo bien -asiente su padre pensativo- vinimos de visita.

-Sabemos que debíamos comunicarnos -explica Taira- pero el cambio tomó mucho tiempo.

-Padre... ¿Qué haces aquí? -dice Lorrein directo al grano- ¿Qué quieres?

-Que tal si hablan en el despacho con calma -dice el padre Beta de Taira sabiendo a qué se refería- Taira se queda con nosotros para platicar de algunas dudas.

-Si, es mejor que primero hablemos nosotros -dice Adam- luego volvemos.

Taira acarició el brazo de Lorrein para tranquilizarla, no entendía bien qué estaba pasando pero debía colaborar ya que se sentía la tensión, saca la bolsa que habían comprado de camino y va con su padre y la madre de Lorrein a la cocina, vio cómo aquellos tres alfas se iban hacia el despacho, le pedía a la diosa porque no empezarán a enfrentarse, la madre de Lorrein la abraza y solo le sonríe calmada empujándola a la cocina.