Tú Mi Única Alfa (GL /Yuri)

35. El Juicio 2/2

¡Advertencia!
Estos dos capítulos contienen situaciones que no deben ser repetidas por ningún motivo.
Leer bajo su responsabilidad y reflexión, por favor no imitar.

Cuando una persona se siente en una situación de desesperación, puede hacer cualquier cosa por ello, a veces actuamos sin pensar, otras veces ya tenemos algo como salvavidas, pero cada una de ellas a su manera quiere liberarse, vivir y dejar atrás lo malo, algo que grité que pudo hacerlo, aunque la idea se un poco incoherente, Korn era un viejo lobo que sabía diferenciar de lo planeado a gritos de auxilio, había vivido igual o más que King, pero en sus cinco sentidos agradecía que fuese él.

Korn había pasado por la misma situación una vez y sabía que aquella primera vez era una llamada de auxilio porque no sabía que los iban a perseguir, había sigo en el tiempo de Aquiles dónde habían empezado las inscripciones, esa vez ellos debían ser juzgados por matar, usurpar, tocar y demás cosas a los aldeanos y aldeanas de aquel pueblo, pero King llegó con aquel soldado que parecía alguien insignificante, a veces uno no sabe quién es el mejor de todos.

Era la misma situación, la misma pregunta, el mismo pesar, pero diferentes tiempos y diferente elección, ahora iba a decir todas y cada una de las atrocidades, aquel humano no era su aliado, pero no podía irse porque quería esperar el momento del sufri y era lo menos por haber visto morir a su Omega y pediría por ella también, Andreu parecía en saco de box usado, su cuerpo iba perdiendo sangre, pero ante la pregunta de Lorrein parecía volver a la vida, solo para que Korn hablara.

-Esta vez diré todas y cada una de ellas -dice Korn hablando- luego de esto ante tu juicio pediré con mi Beta y por mí.

-Bien, comienza... -dice King mientras todos estaban atentos-

-Este humano ha hecho cosas atroces, tantas que es una vergüenza ser parte de esto -suspira rememorando- desde siempre.

-Dimelas -exige King tomando aire pesadamente- las principales.

-La primera fue que eliminó a gente de manera tortuosa -suspira- a mi destinado, a su padre y a su descendencia misma.

Andreu se removía con cada palabra porque sentía que se le abría la piel, cada acusación era dolorosa de manera física, trato de salir a flor de piel pero King no le dejó, su poder era absoluto y nadie podía contradecir o combatirlo.

-La segunda hizo daño al destinado de nuestro rey, eso es imperdonable -dice Korn con lágrimas- trate de frenarlo, de ser su conciencia, pero se alimentaba de ello.

-¿Le daño de manera física? -gruño King- que le hizo a mi Omega.

-Si rey, física, mental y emocionalmente -suspira Korn cansado- él y el aliado de mi destinado.

-Y finalmente -dice King a punto de hacer erupción y todos lo notaban- la tercera.

-Finalmente se entregó al maligno -gruñe Korn de indignación- hizo un acto demasiado bajo, se entregó sin más cayendo en la trampa del maligno y a mí me torturaron, me enloquecieron.

Todos veían como el juicio de King hacía estragos en Andreu, pero Korn seguía las órdenes de su rey, King asintió ante las palabras y se acercó a revisar las armas sacando unas sagas de plata, eran unas cuchillas demasiado afiladas y preparadas para esta situación, Korn debía ser liberado una segunda vez, debía purificar el alma corrompida de aquel lobo, porque en esta ocasión el lobo no había corrompido al humano, era el propio humano que le estaba corrompiendo.

Se acerca con cuatro cuchillas y el cuerpo de Andreu se remueve del susto, Korn estaba calmado sabía que el ritual iba a iniciar, el ritual purificador era un acto físico, que consistía en castigar el corazón y el alma de quién había corrompido y hecho maldad, todos en la habitación estaban en silencio expectante, antes King podía hacerlo pero completo con su destinoado era el doble o más efectivo.