BABY THOUGTHS

Capítulo 12

La omega sonrió al mirar la carita
de gatita mojada de su bebé, esta
mantenía aquella expresión seria
mientras su cabello mojado se
pegaba a su frente, sabía muy bien
que la hora del baño no era para
nada su favorita, pero su pequeña
era una buena niña y con todo y
malhumor colaboraba con ella,
Enid quitaba la espuma del suave
jabón de bebé de su cuerpecito con
delicadeza, y Yoko se dejaba hacer
quedándose tranquilita.

-Buena bebé- felicitaba
manteniéndola agarrada de su
bracito, orgullosa de su cachorra.

"Claro, pero no creas que esto es
gratis, esta noche me darás mi
lechita"

-Wednesday muévete, Yoko ya terminó su baño- llamó Enid, mientras sacaba a la bebé de la bañera con cuidado, envolviéndola de inmediato con una toalla, prefería evitarle cualquier enfermedad por exponerla al frío, salió del baño tomando camino hacia la habitación, su esposa ya venía en camino, sintiéndose regañada.

-¿Hey, no nos ibamos a bañar
juntas?- reclamó pero Enid no se
detuvo pasó de largo, ya que la bebé
temblaba de frio en sus brazos- Me
dueles Enid.

Mientras la alfa se bañaba, la omega secaba a la cachorra con ternura, procurando no lastimar su sensible piel de bebé, a su lado en la cama ya se encontraban algunas cremitas que se encargó de esparcir por el cuerpecito que se encontraba sobre la toalla, masajeando sus brazos en el proceso, hasta sus piernas y piecitos, cuando por fin terminó le colocó el pañal.

"Que buen servicio"

Yoko se sentía como una reina con
los tratos cariñosos que le daba su
mami, se reía a carcajadas cuando
besaba su barriguita repetidas
veces, jugando con ella, era así
como sin darse cuenta terminaba
vestida con la ropa más ridícula
que pudieron encontrar, un traje de
pato.

-Hermosa- le susurró Enid antes
de dejar un beso en su frente,
poniéndole su chupón y dejando un
sonajero que emitía luces de colores
en su pequeña manita.

"Lo sé mami, lo sé"

Claro que era hija de Enid y Wednesday.

La omega la tomó en brazos y
cuando la bebé se disponía a cerrar
su puñito sobre su playera como
acostumbraba fue dejada en su
cuna, una traición que no vio vemir
de su amada mami, Enid revisó
que todo estuviera bien y que no
hubiera nada que considerara
peligroso, quitó la mayoría de los
peluches que allí se encontraban,
era un poco paranoica.

-Mami se va a bañar, vuelvo rápido
bebé- susurró y luego salió de
la habitación dejando la puerta
abierta.

"¿Pero mamá Wednesday no estaba en el baño?"

Yoko tomó entre sus brazos uno
de los pocos peluches que había
dejado su mamá en su cuna,
específicamente uno de un
adorable pollito, que realmente
era su favorito, porque se lo había
regalado su tía Marilyn y aun podía
sentir su aroma en él.

-Es rápido Weds, ya quedamos de
visitar a Larissa- la voz de Enid se
alcanzaba a oir en la habitación y
Yoko se puso alerta mirando hacía a
todos lados, pero no, mamá todavía
no estaba ahí.

-¿No podemos faltar? Tampoco
somos tan indispensables- y esa era
mamá Weds.

-¡No, ya te dije!

"Ah, que flojera visitar a Larissa y eso que ni siquiera camino"

La pequeña Addams volvió su
concentración al peluche en su
mano, realmente no tenía idea de lo
que debía hacer con él, así que solo
lo abrazó, se sentía tan tranquila
con el aroma que comenzó a
pensar en galletitas de chocolate
instantáneamente, las amaba tanto,
casi como a sus mamás, o bueno,
ella todavía no sabía cómo "medir"
el amor que sentía.

-Hey, se me cayó el jabón porque no
me lo pasas- minutos después volvió a escuchar la voz de su madre alfa.

-¡Wednesday!- regañó la omega.

-¿Y ahora qué hice?- dijo con
indignación la alfa.

Cuando pasaban algunos minutos
más comenzaba a desesperarse,
aunque disfrutaba de la paz, no le
gustaba estar solita, después de todo solo era una bebé así que quitó
el chupón de su boca y comenzó a
balbucear, tratando de llamar la
atención de sus madres, sonando
demasiado tierrna.

"¿Se olvidaron de que tenían una
hija? ¡Yo necesito compañía! Qué
clase de madres son?"

No pasó mucho tiempo cuando Enid apareció con una toalla enrollada en su cuerpo, se acerco a la cuna sin tomar a la pequeña porque aún no se secaba bien, simplemente se apoyó en el barandal y acarició su cabeza con cariño, apartando algunos mechones de su carita.

-¿Qué pasó mi cielo?- dijo con una
voz un tanto aniñada, según ella
para obtener mejor la atención de
la cachorra, la bebé la miró con un
pucherito en sus labios.

"Bien Yoko ya la tienes, ahora
procede con lo siguiente, así no te
querrá dejar"

-Ma...Ma- rayos lo había practicado
por bastantes meses pero aun no
salía como debía ser, aunque claro
al mirar los brillosos ojos de su
mamá supo que había funcionado,
no se podía contener de emoción.-
a ma.

-¡Wednesday, Yoko me dijo mamá!-
Gritó sin pensarlo dos veces, tomó
a la bebé importándole poco estar
mojada, y besó repetidamente su
carita.- Mamá, di mamá cariño.

"Pff los adultos son tan fáciles de
manipular... Pd: te amo mami"

-Ma...

Wednesday que en ese momento estaba entrando debido al grito
de su esposa, sonrió en grande y
aplaudió, su bebé estaba creciendo
tan rápido, nada más ayer era una
pequeña bolita de masa rosada.

-Saliste igual de inteligente que
yo- bromeó tomando la manita
de la pequeña.- Ahora di, yo no me creo mejor que los demás, sólo soy mejor que tú.

-No lo arruines Wednesday- advirtió Enid.

Y a Yoko le gustaba eso, tener a sus
mamis solo para ella.