ODIO SER OMEGA | KAISOO |

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No, no, no puede ser posible

Debe ser una broma.

Una muy mala broma.

Yixing no puede saber de lo mío con jongin, no hay forma.

_ ¿No vas a responder mi pregunta? _yixing levanta una ceja, sus pasos acercándose a mí hasta arrinconarme contra la pared.

El tiempo y la angustia por llegar a tiempo al entrenamiento se fueron volando a Brasil.

_No sé de qué hablas _Trago en seco, sudor bajando por mi frente.

Sólo ahí me doy cuenta de lo mucho que me importaba que no supieran de mis enredos sexuales con jongin, no era únicamente por chanyeol.

Me avergonzaba haberme involucrado con alguien tan sucio como lo es Kim Jongin, involuntariamente me transmite su suciedad.

_ Ah, ¿no? _yixing coloca ambas manos junto a mi cabeza, su rostro muy cerca del mío_ Tal vez debería revisar por segunda vez tu teléfono, quizás lo recuerdes.

Un escalofrío recorre mi espina dorsal. Necesito una bolsa de aire urgente.

¿Él había encontrado algo? ¿Por qué no dijo nada?

_O observar las cámaras de seguridad que hay en cada rincón de mi casa, hay vídeos de ti y jongin muy interesantes _Su sonrisa de boca cerrada me intimida.

Carajo.

Gracias por traerme al mundo mamá, tuve una buena vida.

Yixing saca de su mochila algo que reconozco perfectamente: La camiseta de rayas azules que me puse el día se su fiesta.

_ ¿Esto te resulta familiar? Lo encontré en mi habitación luego de que jongin y tú salieran de esta.

_Eso no es mío _Cruzo mis brazos.

_No puedes mentirme, lo recuerdo a la perfección _Él suelta una risota burlona_ Además, tiene manchas de un coctel que justamente se te había caído a ti en la fiesta _yixing chasquea su lengua y me entrega la prenda de ropa con brusquedad_ Tengo tantas pruebas, ¿quieres que las enumere?

Su mirada determinada me dejó sin excusas, sin salida.

_ ¿Qué quieres? _Pregunto sin más.

No soy estúpido, sé que desea algo a cambio de su silencio.

_Vaya, te rendiste más temprano de lo que hubiera imaginado _yixing ríe con esa risa chillona que ahora me causa escalofríos.

Estoy en el fondo de un laberinto sin escape, mi mentón tiembla, sin embargo, no pienso caer delante de él.

Puede chantajearme, pero jamás verme abatido.

_ ¿Podrías dejar de jugar? _Suelto aire por la nariz.

_Entiendo porque no quieres que se enteren _Suspira_ debe ser muy vergonzoso para ti haber caído ante los encantos de Kim. Mírate, actúas tan diferente de los demás e igual terminaste en la cama de ese idiota _Menea con la cabeza.

Eso es todo.

Nadie tiene permitido decirme algo tan ofensivo.

_No es cierto _Doy un paso al frente.

No seré intimidado por está bola de algodón de azúcar y ego.

_Por supuesto que lo es y lo sabes, eres un nombre más en la lista de conquistas de Kim _Sus ojos no mostraban nada, estaban vacíos.

_Para tu información, él me dijo que le gusto _Le pincho el hombro haciéndolo para atrás.

_ ¿Y en serio le creíste? _Abre su boca sin creer_ ¿Sabes cuantas veces lo escuché decirle cualquier cursilería que se le ocurriera a sus ligues?