Conquistándome desde el Inframundo

7

Jack se dirigió hacia mi mesa, la cuál ya parecía no ser más "MI" mesa, sino "NUESTRA" mesa. Me arrimé un poco para darle espacio a Jack.

-¡Gracias!- exclamó y me sonrió. -Mucho gusto, soy Jack- dijo mientras me extendía su mano. Él era un chico de estatura igual a la mía, pelo negro,ojos verdes esmeralda y linda sonrisa.

-Samantha- dije algo nerviosa mientras extendía mi mano para responder su gesto. Él tomó mi mano y la besó, como si estuviese saludando a una princesa, lo cuál, para mi fué muy raro, ya que yo no tengo ni una pizca de ser princesa.

-¡¿Qué haces?!- dije apartando mi mano.

-Oh... Umm... Lo siento, es que así solemos saludar a las damas en mi país...- dijo mientras apartaba su mano también, parecía algo nervioso.

-¡Ah! Ya veo...- exclamé - Pero, date cuenta, no tengo ni un grano de ser una dama sofisticada, más bien, soy todo lo contrario.- reí.

-Hmmm... Para mí, todas las mujeres son damas, aunque tú digas lo contrario- sonrió, detecté rápidamente sus intenciones. Este chico por alguna extraña razón me recordaba a alguien, no sé a quien... Su voz se me hacía familiar, al igual que su mirada. Hoy estoy muy olvidadiza, el día de ayer me afectó mucho...

-Esta chica será la excepción- sonreí.

-Me caes bien Sam- rió, al igual yo al escuchar su respuesta.

La clase pasó rápido, él era muy bueno en este tipo de cosas y cuando veía que no entendía, me explicaba y me ayudaba, la verdad, admito que es muy divertido trabajar con un compañero, en especial él... ¡¿Pero qué digo?!

-Samantha Parks, ¿Acaso te estás enamorando?- me decía mi subconsciente.

-No, no puede ser, yo nunca me debo enamorar, es en lo que menos pienso, además él es solo un amigo...- me decía mentalmente. Ahora mismo tengo una pelea mental con mi subconsciente.

-Así comienza todo querida- se reía mi mente.

-¡Ya basta! No tendré nada con el amor y así se quedará- grité mentalmente.

-Esta bien Parks, pero el día en el que caigas en los brazos de ese chico te acordarás de mí- se burló.