• Epílogo •

80 11 0
                                    

Tras escapar de Aaron y las SSF, Nathan se escondió en Canadá durante un tiempo.

Sin embargo, después de tres años de soledad y aislamiento, Nathan regresó a Inglaterra con la intención de emprender un viaje a través del tiempo.

- Bien Harvey, ¿preparado para encontrar a Sirhan y desafiar las leyes del tiempo? -dijo Nathan a un pequeño hurón que se movía entre sus ropas, impaciente por salir del pueblo de Eskdale y llegar al bosque.

El pequeño hurón de color beige con manchas blancas movía su cuerpo alegremente alrededor del cuello de Nathan para indicarle que ya estaba listo.

Se había acostumbrado a viajar sobre él y ambos se tenían un gran aprecio.

- No sabrás dónde estará Baloon, ¿verdad? -preguntó Nathan, dirigiendo su mirada hacia la manga de su camisa, en la que Harvey se había escondido.

Rápidamente Harvey asomó su cabeza a través del ojal y la movió de derecha a izquierda, dando así, su complaciente negativa.

- Con que no sabes nada del pequeño bribón ¿eh? Ya puedes apresurarte en decirme dónde está o te quedas sin galletas, amigo -declaró Nathan, elevando una ceja y dejando entrever una media sonrisa mientras miraba a su pequeño compañero.

Entonces Harvey saltó de la camisa y se dirigió a un pequeño agujero que había en el camino que habían dejado atrás, antes de llegar al bosque temporal.

Nathan le siguió. Sabía que encontraría a su erizo.

- Venga Baloon, pequeña bola rosada, ponte sobre mi cabeza y no te pongas a refunfuñar que ya he tenido bastante con Harvey y no tenemos tiempo que perder -dijo Nathan extendiendo su brazo hacia el agujero, permitiendo así que el diminuto erizo subiera.

- Chicos, cruzad los dedos, creo que ésta vez la encontraremos -añadió esperanzado, mientras se colocaba su oscura túnica antes de adentrarse en el bosque de Eskdale.

* * *

Te Necesito (Vol I. Las Fronteras del Tiempo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora