BAJO LA LUZ DE LA LUNA 🌕✨ -- NAMJIN T.2

Capitulo 6

— No creo que sea tan malo. — Habló May recostandose contra la pared del lugar.

Yoongi estaba parado frente al trono, caminando de un lado a otro bajo la mirada de su amiga y los pocos guardias que tenía. Estaba preocupado por Namjoon y SeokJin. Aún el humano no se comunicaba con él y por ello estaba intranquilo.

— Sabes cómo es Namjoon. — Habló Yoongi dejándose caer como costal de papas en el trono. — Ah, no entiendo porque parezco una mamá.

— Son tu familia. Es normal que estés preocupado. — Volvió a hablar May cruzando sus brazos. — Ve con ellos.

— No puedo. — Frunció el ceño y se levantó de su lugar para comenzar a caminar de un lado a otro nuevamente. — Si me voy, ¿Que pasará con el reino?

— Hablas como si fuera a pasar algo malo. — Gruñó la vampira y dejó de recostarse contra la pared para acercarse a Yoongi. — Yo me encargaré. Lo único que tengo que hacer es inspeccionar que todo valla bien.

Yoongi no se lo pensó más y asintió decidido. Confiaba mucho en May, porque a pesar de ser algo cansona, era una amiga sincera y fuerte, capaz de afrontar lo que sea y estaba seguro de que ella podría ser una buena líder mientras no iba a estar.

— Me llevaré a tu novio.

— Cuídalo. — Sonrió y Yoongi asintió.

....

Namjoon estaba apretando fuerte su mandíbula, tratando de no descontrolar sus emociones. Quería evitar posibles inconvenientes con la manada y el padre de Taehyung, pero aquel mocoso parecía que quería unos muy buenos golpes.

— Me harías un favor si te callas la maldita boca. — Gruñó un poco molesto y al querer avanzar para retirarse, el chico volvió a hablar.

— ¿Te molesta que te diga la verdad? — Dijo volteando a verlo con aquellos ojos de color verdes fuerte. — Parece que no habías pensado en eso.

Namjoon estaba perdiendo la calma. Sabía que SeokJin tenía muy poco de vida, pero desde ese entonces no le había dado importancia. Amaría a Jin hasta el resto de sus días, pero... ¿Sería capaz de soportar su muerte? El humano era su permanencia, así que si llegaba aquel horrible año, su mundo se volvería una mierda y todo ese amor lo consumiría por la perdida. Pero no, no quería perder a Jin.

De pronto, su corazón sintió una opresión extraña, tan fuerte que tan solo de imaginar perder al humano lo llenó de angustia y ansiedad. Perder a Jin o imaginar que dejó de existir en el mundo lo estaba asustado a tal punto que su respiración estaba atascada. Tampoco podria evitarlo, aquella fecha llegaría tarde o temprano y se quedaría solo. Tenía miedo. Aquel imbécil le había hecho pensar en la realidad y lo odiaba.

— Que malditas ganas de arruinarle la vida a un completo desconocido. — Gruñó Namjoon volteando a ver al joven lobo con sus iris al rojo vivo. Sentía su sangre fluir con más rapidez y sus manos apretadas comenzaban a doler. — ¿Tienes familia o algo?

— ¿Que te importa si la tengo o no? — Soltó lejano y altanero, por lo que en instantes se vió siendo agarrado fuertemente del cuello de la camisa. Tan pronto como miró los ojos color fuego del vampiro, el miedo comenzó a recorrer su cuerpo con rapidez.

Namjoon había aparecido tan derrepente que ni siquiera pudo darse cuenta en que momento logró hacer que estuviera tocando el suelo. Había estado recostado en esa rama a una buena altura, pero ahora, se encontraba siendo agarrado del cuello de la camisa que apenas las puntas de sus pies tocaban el pasto alto.

— Fíjate en como me hablas maldito imbécil. Puedo pulverizarte si lo deseo y las ganas no me hacen faltan. — Gruñó soltando al chico de mala gana y este cayó al suelo algo aterrado. — Si te vuelvo a ver cerca de nosotros, haré de tu vida un infierno.