Mayordomo de Orejas Caídas [ABO]

Capitulo 48

La puerta del dormitorio se abrió suavemente. Envuelto en su pijama, Yan Yi se paró a lado de la puerta, sobre la alfombra y los miró a los dos conmocionado.

El pequeño Omega Araña contuvo el llanto y sollozó mientras miraba a Yan Yi.

Se quedó con la mirada perdida durante unos segundos y luego extendió débilmente su pequeña mano hacia Yan Yi.

Yan Yi ensanchó los ojos antes de extender vacilante la mano para tomar al niño de los brazos de Shao Wenjing.

"Conejito"

Shao Wenchi se abrazó al cuello de Yan Yi, con su tierna carita frotándose contra la hendidura de su cuello.

Los apagados ojos de Yan Yi se iluminaron suavemente. Acarició al pequeño bebé en sus brazos mientras liberaba lentamente suaves feromonas tranquilizadoras.

"No llores".

"Mm"

Shao Wenchi apretó obedientemente los labios, haciendo un mohín con su suave cara, y en voz baja, le explicó a Yan Yi.

"No es un mal hermano, no suele intimidar a la gente, no le tengas miedo".

Shao Wenjing frunció las cejas y esbozó una leve sonrisa. Sujetando su brazo de forma caballerosa, se apoyó en el marco de la puerta.

"Oh, por supuesto. Debes recordar que soy un gran tipo".

El joven maestro Wenchi se acercó corriendo de repente. El chef había preparado algunos platos más. Shao Wenjing ordenó a sus guardaespaldas que eliminaran todos los rastros de feromonas dejados por Shao Wenchi fuera de la mansión cuando llegara, para no dar a Lu Shangjin la oportunidad de aprovecharse de ello.

Todo estaba bien dispuesto.

Shao Wenjing volvió a tiempo de ver a Yan Yi sentado con Wenchi en la mesa del comedor. Wenchi sostenía obedientemente una pequeña cuchara de cerámica para comer mientras Yan Yi pelaba una gamba y la partía en dos trocitos antes de colocarla en su pequeño cuenco.

Wenchi parpadeó con sus grandes ojos y dio las gracias con voz quebradiza.

Su cara, blanca como la gelatina de leche, tenía una gota de ketchup. Su par de ojos oscuros y brillantes se posaron en su carita del tamaño de la palma de la mano. Él y su hermano eran iguales, sus ojos brillaban ambos con un lustre metálico, como una arañita muy linda, mirando despistado las cosas que le intrigaban.

Yan Yi se quedó atónito un momento. Frunció los labios y sonrió, recogiendo una cucharada de granos de maíz en su plato vacío, y añadió dos trozos de verdura.

Wenchi miró apenado las verduras. Sintiéndose avergonzado, dijo en voz baja:

"Esto no sabe bien".

Yan Yi le cogió la mejilla con una mano y le miró con dulzura

"Es bueno para tu cuerpo, no te saldrán granos rojos en la cara cuando seas mayor. Sólo come un poco".

"Hmm". Wenchi dudó un momento, luego abrió la boca.

"Buen chico." Yan Yi recogió las hojas de verdura y las introdujo en la boca de Wenchi, la punta de sus palillos raspó la sopa de verdura de la comisura de sus labios.

Al ser elogiado, Wenchi hinchó las mejillas y sus grandes ojos se curvaron en un arco.

"Si lo sigues mimando, en el futuro necesitará que le des de comer todos los días". La figura sombría de Shao Wenjing apareció tranquilamente por detrás, con las manos apoyadas en el respaldo de la silla de Wenchi. Bajó la cabeza y regañó "Shao Wenchi, come tú solo".