Capitulo 48.

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1 de Abril 2022
Por la noche.

Las fuerzas que tenía en el cuerpo eran magistrales después de varias semanas en cama.

Arthur había estado todo este tiempo conmigo. Cata, Javier, Jessie, Sam, Diego y Osvaldo estuvieron en las partes más difíciles del tratamiento.

Por fin ayer habían acabado esas dolorosas sesiones de quimioterapia, lo cual era muy bueno porque no podía aguantar una semana más, además la temporada había iniciado y yo quería estar para todos los chicos, sobre todo con Max.

Todo era muy difícil pero para el era completamente diferente, sabía que sacrificaba tanto por mi y por las niñas cada fin de semana que podía para ir a vernos, así que aunque no me parecía la idea de presentarme en el paddock con mis hijas y más en mi estado, se que para Max sería algo importante tenernos con el.

Javier, Lilith, Martha y yo viajamos con las niñas para venir hacia Arabia Saudita para el circuito de Yeddah, la semana anterior en la primera carrera, la había ganado Charles pero para Max no fue una carrera muy buena que digamos.

Así que decidimos viajar casi a media noche del sábado para llegar a Yeddah por la mañana gracias al horario que tenían, cuatro horas más así que llegaríamos un poco antes de la carrera en domingo.

Había aprovechado que Martha y Lilith cuidaban a mis hijas para ir al baño así que aquí estaba mirándome al espejo.

De por sí no me gustaba mirarme al espejo y ahora era peor, estaba muy delgada y más de lo que era antes. Mi cuello ahora era muy delgado y mis manos estaban cubiertas por pecas y manchas de un café claro, mi rostro antes tenía pocas pecas al igual que las de Checo pero ahora se veían mucho más notorias.

Y bueno, lo que cambio más en mi era que mi cabello desapareció de mi cabeza, apenas y se notaba que había crecimiento. La parte que más amaba de mi había desaparecido hacia varias semanas antes.

De echo, todo lo que yo creía valioso en mi desapareció después de la cirugía. Ahora mi vida se basaba en medicamento, sueros, dolores de cabeza y un sentimiento de inutilidad que vive todo el tiempo en mi mente.

Si no fuera por Lilith, Martha y Arthur, no se que hubiese Sido de mis hijas. No me lo tomen a mal pero me había apartado totalmente de ellas y dios mío, no dejaba de repetir ese sentimiento de culpa por ser una madre tan inútil.

Juro por los Miles de dioses existentes en el mundo que de verdad intentaba hacer todo de mi por ellas pero mi cuerpo estaba cansado y no dejaba de pensar en todo y a la vez en nada.

Tome mi maquillaje e intenté ocultar por todos los medios mi demacrado rostro y con esfuerzo me coloque otra ropa para poder lucir un poco presentable aunque la verdad sabía que todos me iban a ver diferente.

Era la primera vez que el público me vería así y sería la primera vez que hablaría en público de lo que sucedió ya que ni Max ni yo quisimos que nadie se enterase a excepción de nuestros amigos y familia.

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El poco viaje que nos quedó, Lilith y yo nos dedicamos con esfuerzo a descansar muy bien a las niñas así que cuando aterrizamos, ellas estaban completamente activas y risueñas como siempre.

Tomamos todo el equipaje de nosotros y Javier junto con Martha tomaron los portabebés para meter a las niñas y caminar a la sala de recepción del aeropuerto para encontrarnos a Eduardo Freitas quien era un viejo amigo de la W series que ahora tomaría el puesto de Michael Masi, además fue quien insistió en venir por nosotros.

//Rush. Fórmula 1// Max Verstappen StoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora