El dia del colectivo (+18)

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Mia:

6 meses de embarazo no eran nada faciles, agradecí que las giras estén en pausa, aunque extrañaba el escenario y podía ver que a Guido le pasaba lo mismo.

Pero a decir verdad nunca vi a un hombre tan emocionado por una panza que crece cada día más, no había una sola mañana en la que no me levante y lo tenga a Guido apoyado sobre mi estómago. Me daba ternura pero también risa, estaba un toque obsesionado.

El mudarnos juntos fue de las mejores decisiones que tomamos, Cuty y Pato ayudaron en todo y Lu la novia de Cuty nos decoro toda la casa, obvio con ayuda mía, aunque todos querían que me quedara quieta no podía evitarlo,me sentía inútil sin hacer nada.

Guido:

6 mese, los 6 meses de mi vida más movidos, yo pensaba que las embarazadas se quedaban quietas pero al parecer no es el caso, Mia estaba incontrolable, super inquieta iba y venía y yo sentía que tenía que ir atrás de ella como cuando un nene anda en bicicleta.

-Che rubio, probaste darle un ansiolitico?- Me decía Pato apoyándose en mi hombro mientras veíamos como Mia se movía de un lado para otro adentro de la casa.

-Imposible, esta terrible, no se que es peor si esto o los antojos raros que tiene.
Pato me palmeo la espalda, se metió el escarbadiente de nuevo en la boca y me revoleo los ojos.

Estábamos haciendo un asado en casa, como casi todos los fines, pero esta vez solo hermanos y parejas, Cuty andaba con Lu para todos lados y Pato andaba enganchado con una colorada que conoció en el aeropuerto, este pibe siempre tiene historias de amor raras.

Entre a casa a ver porque carajos Mia iba de acá para allá.

-Rubia, necesitas algo?-Mia se dio vuelta y se quedó mirándome de arriba a abajo.

-Sexo- se me tiro arriba y puso los brazos en mi cuello.

-MIAA- Le dije en un grito susurrado.

-Guido hace 2 meses no cogemos, porfissssss- Otra de las cosas raras del embarazo era la calentura de Mia, que no puedo negar que me fascina, pero me daba cosa, había un bebe de por medio-Guido no le vas a hacer nada al bebe- me leyó la mente, como siempre.
Además seguía teniendo terrible lomo, era una bestia esta mina y el embarazo le pintaba de 10.

-Rubia, ya lo se, pero me da cosa, además ahora están mis hermanos afuera- me revoleo los ojos y me soltó, se dúo la vuelta y volvió a la cocina.

-Como si no me hubieras dado en el colectivo de los recitales rubio, ya vas a ver- dijo pasándome por al lado con dos ensaladas y me dejo boquiabierto.
Me acordé de esa vez, fue terrible.

9 meses atrás...

Guido:

Estábamos de gira y como quedaba cerca de Buenos Aires le dije a Mia que esos acompañe, los chicos obvio accedieron y Mia fue difícil pero lo logre.

-Rubia, queres comer algo? Ahora bajamos en una YPF- estaba sentada al lado de Pato mirando como jugaban a la play.

-No tranqui, estoy bien-Me tiro una mirada rara y nunca capte.

Al rato los chicos pararon y empezaron a bajar para ir a comprar cosas, estaba a punto de bajar y Mia me agarro el brazo.

-Que pasa amor, queres algo AK final?- no me miro, Dirigió la mirada atrás mio y le diji directo a Pato.

-Comprarle dos sanguches con patitas y un agua-Le guiño el ojo seguido de eso.

-Como usted mande Rubia-Pato salio del colectivo y atrás de el cerro la puerta.

-Mi que pas...-Me subió de las escaleras de un  tirón y me estampó un beso.

-Vos te quedas conmigo rubio, tenemos 10 minutos te basta?- Me dijo a dos centímetros de la boca.
La mire y no le dije nada.

Mia:

No me respondió nada y con eso y su sonrisa de costado ya sabia la respuesta.
Volvió a besarme y empezó a llevarme de espaldas a una de las mesas chiquitas que estaba en el colectivo.

-10 minutos Rubia y te hago Mia en 7.
Me subió la pollera y en ese momento me auto felicite por ponérmela.
Me bajo lo único que cubría mis partes íntimas y mientras me besaba el cuello yo le desabrochar el Jean y escuche como gemia en mi cuello.
Sentí como nuestras partes ya desnudas de rozaban.

-Guido por favor- le supliqué al oído y no me hizo esperar más.
Se introdujo dentro de mi y al mismo tiempo me agarro con fuerza la nuca, al ser más alto podía verme a los ojos mientras me tiraba para atrás.

-Te amo Mia- Eso me expiraba todavía más.
Sentí como usaba su mano fría para estimular me mientras seguía introduciéndose en mi.

-Guido por favor- apoye mis dos manos en la mesa y me tire para atrás, su otra mano se metió adentro de mi remera y empezó a acariciar mi pezon muy despacio, sigo sin entender cómo puede hacer tantas cosas a la vez, es como sie estuviera en todo mi cuerpo, no se quiere perder ningún pedazo.
Me agarro de la espalda y me pego a su pecho, me beso con una fuerza irreal, ya podía sentir los labios inflamados, y los de el también .
Estábamos por acabar, juntos como casi siempre.

-Mia por dios-fui rápida y en un movimiento me puse de espaldas a el y con el pecho en la mesa, sabía que le encantaba esa posición y a mi también.

-Me fascinas- dijo y procedió a introducirse de nuevo en mi, aproveche que no había nadie y deje que unos gemidos desesperados salgan sin aviso, a lo cual Guido me tapo la boca y eso me ayudó a acabar y se ve que a él también,  me quedé unos segundos contra la mesa y sentí que Guido me bajo la pollera y me subió la ropa interior que no se como seguía en uno de mis píes.

Para cuando me di vuelta Guido ya tenia puesto el Jean y justo se sintió que abrieron la puerta.

-Me vas a matar Mia.

-Lo se.

Vi aparecer a Pato y se quedó mirándonos unos segundos, se acercó e hizo como si nos oliera.

-Hijos de puuuta , ustedes comen adelante de los pobres.

Era obvio el ambiente gritaba SEXO y Pato lo sabía.

AHORA...

Guifo:

Mierda, me acordé de eso y no podía negar que ahora me moría de ganas de agarrarla , llevármela a la pieza y hacerla mía mil veces.

Real Mia me iba a matar y ella lo sabía.

Mi Algo PersonalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora