La puerta del garaje s abrió dejando pasar a un rubio de cabello liso y ojos verdes oliva. El adolescente de al menos catorce o quince años barrió con la mirada la habitación y sonríe al ver al niño aún atado durmiendo en el aparato de ejercicios.
Kevin, así se llamaba el adolescente, Kevin Smith, era el primo mayor de Paul, casi un hermano mayor para el chamaco de doce años. Kevin se acercó al atado Paul, viendo cómo el niño respiraba mientras se sacudía un poco. Kevin tuvo la tentación de hacerle cosquillas y mantenerlo allí más tiempo, pero ya vio que sufrió lo suficiente, y Lee preocupaba mucho su primito favorito.
El adolescente tomo las tijeras y muy cuidadosamente fue cortando la cinta adhesiva, burlándose de él charco de agua que se formó en el ombligo del rubio. Finalmente luego de dieciocho horas, Paul estaba libre... y aún durmiendo.
Kevin no le quitó la venda, ya que quería hacer una última broma, puso sus dedos en las rodillas de Paul, y sin aviso las apretó varias veces. Las reacciones fueron instantáneas, Paul grito y dió un salto mientras se apretaba de los dedos de Kevin; Paul cayó de trasero al suelo todo agitado girando la cabeza como cual conejo se tratase, de repente se da cuenta de que estaba libre.
Sorprendido y muy confundido lleva sus manos a la cara y se quita la toalla que le tapaba la vista, luego de gemir por la repentina entrada de luz a sus ojos, parpadea y mira a su alrededor... pero es interrumpido cuando unas manos le hacen suaves cosquillas en el vientre.
-Buenos días primito!- dice eufórico Kevin mientras jugaba con el vientre de Paul.
-HAHAHAHAHAHAHAHAHA NO POR FAVOR HAHAHAHA HAHAHAHA YA NO AGUANTO!- dice el pequeño mientras trataba de apartar las manos.
Kevin se burla mientras se aleja del rubio cansado, estuvo impresionado de Robin y Neal, esa si fue una buena broma, lamentaba no haber sido parte de ella. Paul finalmente se levanta y se le ve la cara de enojado.
-NO PUDISTE HABERME RESCATADO ANOCHE?!!! ESTUVE GRITANDO PARA QUE ME AYUDEN!!-
-Lo se, te escuché...- se burla Kevin -...Pero que clase de primo sería si te niego la experiencia...?-
-Mejore cayate... estoy demasiado cansado para respuestas ingeniosas... solo diré que un cabello de zanahoria y un piel de chocolate van a pagar claro... ahora sí me disculpas, llevo más de dieciocho horas atado y aguantando las ganas de orinar, si me disculpas...- y sale corriendo como alma que lleva al diablo.
Kevin se quedó allí con los ojos abiertos de la sorpresa.
-Dieciocho horas aguantando las ganas de orinar...- repitió sin creerlo -...hay tanto mal en esa simple oración - dice negando con la cabeza -...si, Fuy malo a no rescatarlo- comentó arrepentido, el mismo no aguanta ni cinco minutos.
🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶🪶
Paul aparece en el comedor, con el cabello mojado, vistiendo un chándal verde con blanco y con una toalla en sus hombros. Luego de lograr liberarce, se dió una ducha relajante, su piel parecía que estaba más sensible que antes por lo que sus amigos le hicieron, además de cepillarse por más de una hora gastando todo el tubo de crema dental aún creyendo que le obligaron a comer una media sucia.
Inmediatamente el niño se come todas las tostadas y todo el cereal como si no hubiera un mañana, Kevin no comento sus modales, obviamente actuaría igual si no comiera nada luego de tantas horas atado.
-Robin y Neal están en el cuarto de invitados si te interesa- dice Kevin con una sonrisa.
Inmediatamente Paul suelta la cuchara mientras su rostro proyectaba sus deseos de venganza, generalmente como buena víctima de bullying de amigos lo dejaba pasar... pero está vez no.
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Super Ticklish
FantasíaPaul era un gran admirador de los superhéroes, desde pequeño quería ser uno. Con sus amigos tienen cientos de aventuras jugando a los héroes. Pero los superhéroes no son la mayor afición de Paul, en el puesto uno de las cosas que ama está sin duda s...