Paul era un gran admirador de los superhéroes, desde pequeño quería ser uno. Con sus amigos tienen cientos de aventuras jugando a los héroes.
Pero los superhéroes no son la mayor afición de Paul, en el puesto uno de las cosas que ama está sin duda s...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
~🍂~
VOLVIMOS AL AIRE!!
~🍂~
El sol golpea el rostro del rubio, quien hace una mueca mientras usa su almohada para cubrirse la cara. En estás ocasiones de la mañana el odiaba el sol. Antes de poder volver a su lindo sueño de columpiarse por los edificios cual spiderman, el despertador decide que era buena hora para gritar.
>BIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIHHHHHHHH!!<
-Ñññññññ- gruñía Paul tratando de apagar la cosa sin ver.
El timbre del despertador no paraba de sonar a pesar de haber presionado el botón de apagado varias veces.
-Callate cállate! Que me desesperas!- grita frustrado usando su puño para apagar la maldita cosa.
El despertador estaba en pedazos mientras el puño lo atraviesa y abolla la mesa de noche. Paul aún con sueño no lo nota al instante... Solo cuando estaba a punto de dormir es que se da cuenta. Se sobresalta mientras se apoya de la cama en dirección al despertador... El cual no quedaba nada más que tornillos y metal abollado, junto a una depresión en la mesa donde su puño golpeó.
-Qué?... Qué?- parpadea confundido.
Antes de pensar en algo, nota lo que queda de la cara del reloj, indicando la hora.
-Carajos!- dice al notar que era tarde.
Sale de un salto de la cama, y se para viendo su cuarto desordenado. Maldice en voz alta mientras se ve aún en calzoncillos de spiderman, rápidamente se pone a buscar su ropa... Pero al abrir los gabinetes los nota vacíos. Desesperado abre todos los gabinetes y todos estaban igual de vacíos, a excepción de su ropa interior.
-Carajos y la ropa?!- grita en frustración mientras toma una toalla y se va rápido a las duchas.
En el baño nota la cesta de la ropa sucia casi vacía, solo encuentra unos monos de chandal de estilo camuflaje militar y unos calcetines grises. Va a olerlos y a pesar de el fuerte olor a sudor estaban lo suficientemente limpios para salir. Así que decide bañarse rápido y hacer malabares mientras se cambia y se cepilla al mismo tiempo.
Las cosas son un desastre cuando al apretar el envase de la crema dental todo el contenido termina disparado al espejo. Haciendo una mueca va por la toalla, pero termina arrancando el tubo de la pared.
