doce

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Las caderas de Jimin se balancean de un lado a otro, cantando una canción de pop en inglés, mientras Jungkook y Jin de vez en cuando le dan voz en el coro desde el sofá o sacuden una pandereta

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Las caderas de Jimin se balancean de un lado a otro, cantando una canción de pop en inglés, mientras Jungkook y Jin de vez en cuando le dan voz en el coro desde el sofá o sacuden una pandereta. Están tan ensimismados divirtiéndose que no se dan de cuenta cuando la puerta principal se abre.

Si no cuando Jimin disminuye su alegre canto y ve un punto fijo a las espaldas de los hermanos con los ojos entrecerrados.

—¡Oh, amorci-! —exclama Jimin, con una sonrisa que se borra al mismo tiempo en que suelta el micrófono al suelo y camina por encima del sofá, señalando a Yoongi—. ¿Qué mierda te pasó en la camisa, Yoongi?

Jin observa a su amigo por encima del respaldo, que se encuentra con su pareja y le pega en el hombro en cuanto el hombre abre la boca.

—¿Eso es sangre?

La vista del mayor se agudiza y ve las salpicaduras que tiene la camisa. Es sangre. Jin mira hacia su hermano, pero este parece más concentrado en mirar su teléfono con una sonrisa tonta.

Cuando vuelve a subir la mirada, se sorprende en que los ojos de Namjoon ya se encuentran posado en él, pero no dice nada.

—Mi amor, no es nada. Yo...—Yoongi mira a Namjoon buscando ayuda y ante el pequeño movimiento de cabeza que pasa desapercibido para el resto, el hombre sabe que no debe decir la verdad. Al menos, no ante la curiosa mirada que le da el hombre mayor—. Tuve una discusión en un bar que termino en pelea y por eso le pedí a Namjoon que fuera por mí.

El castaño puede sentir que toda la tensión en sus músculos se evapora, junto a un suspiro tembloroso que ni sabía que había contenido.

—¿Acaso eres un mocoso y Namjoon hyung tu representante? —Jimin lo señala de arriba hacia abajo—. Pudiste llamarme.

—¿Y qué atacarás al hombre que mancho mi camisa? No, hubiésemos quedado los dos detenidos.

—Tienes razón. Es que... Te regalé esa camisa cuando cumplimos 100 días de novios, bastardo. ¿No podías contenerte?

—¿Querrías que me golpearán hasta terminar en un hospital? La camisa hubiese quedado peor.

Namjoon a su lado rueda los ojos, cansado y sabiendo en lo que terminara la pequeña discusión de esos dos. Estira la corbata y sin más, se aleja hacia su habitación.

—Eres un idiota.

—Lo sé, cariño.

—¿Al menos ganaste? —Jimin se acerca a Yoongi con un puchero, rodea los hombros de su pareja y se inclina para unir sus labios.

—Siempre gano, mi amor. Lo sabes.

—Te mereces un premio, mi campeón. —suelta con una risita.

El entrecejo de Jin se frunce en el momento en que nota como su amigo y su novio se besan. Toma el último sorbo de su cerveza para mirar a Jungkook que escribe rápidamente en su celular.

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⏰ Última actualización: Jun 02 ⏰

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