𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐓𝐑𝐄𝐒

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—El… regreso— dijo con la voz endeble, carente de alguna expresión, estaba ido, tanto que el especialista frente a él temió por un segundo que estuviera roto… aún más roto

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—El… regreso— dijo con la voz endeble, carente de alguna expresión, estaba ido, tanto que el especialista frente a él temió por un segundo que estuviera roto… aún más roto.

—¿Regreso?— preguntó el hombre reiterando la información en su cerebro, eso no era bueno— Han pasado casi dos meses ¿no?— le cuestionó nuevamente viéndole con mucha atención, Sunghoon asintió— ¿Cómo te sentiste?.

—Como una autentica mierda—dijo con fingida gracia— Mi cuerpo se sentía como si estuviera forzándose a rechazar metanfetaminas a las que me había vuelto adicto, solo… lo vi ahí, en mi puerta, eso basto— dijo sintiendo una enorme vergüenza por sentir que aun era débil.

—¿Funcionó resistirse? ¿Cómo lo manejaste?— con sumo cuidado continuo interrogándole mientras anotaba algo en su libreta.

—Creo que lo hice bien— respondió con sinceridad— Aunque quizás… me seguía viendo débil y manipulable frente a él, se atrevió a decir que volvería y que me haría ver que podía ser diferente— dijo con los ojos cristalizados y su pecho doliendo como si su corazón fuera una bomba con los minutos contados.— Dr. Kim, siento… que soy tan débil que si vuelve una vez mas podría solo regresar a ese pozo húmedo y oscuro, que tal vez… podría creerle— agregó con la voz rota.

—Sunghoon, no llevas mucho tiempo aquí así que aún será difícil, pero no imposible, podrás con esto— le aseguró — Solo saca todo ¿esta bien?— preguntó con su voz dulce y calma—  Ahora cuéntame exactamente que sucedió…— el pálido sorbió su nariz dispuesto a hablar, al final de cuentas era lo único que tenia en ese momento.

•Flashback•

—Hola, Hoon— saludo mas cercano y amoroso, como si hace mas de un mes no lo hubiera dejado con palabras duras, desconsolado y sintiéndose como el ser humano mas desdichado del mundo— ¿Cómo has estado?— preguntó suave, su corazón dio un vuelco quería decirle que la había pasado muy mal sin él, que incluso se había acostado con alguien más en su ausencia, quería abrazarlo y eso era enfermo.

—¿Que haces aquí?— cuestiono Sunghoon  pasando de él para abrir su apartamento sintiendo sus manos temblar inmediatamente por el nervosismo que empezaba a crecer en sus entrañas.

—¿Qué es esa pregunta, bebé? no estarás hablando enserio ¿verdad?—soltó— Vamos, sabes que eso que dije no es cierto- dijo acercándose lentamente al contrario— Además no me fui por tanto tiempo como para que me superaras tan rápido— dijo con diversión, como si estuviera jugando, como si todo fuera normal, como si todo fuera como antes, tan familiar.

—Eres un descarado— le dijo con ira disfrazada — Es mejor que te alejes— le advirtió con una seriedad en su rostro que no estaba acorde con sus sentimientos, quería besarlo y decirle cuanto lo había extrañado, aunque eso destruyera su mundo mil veces.

—No lo dices en serio— dijo acercándose una vez mas sintiendo la mano temblorosa del pálido sobre su pecho que por inercia colocó, como si estuviera luchando consigo mismo, su corazón quería una cosa pero su subconsciente sabía que no era nada que le hiciera bien.

𝐏𝐑𝐄𝐓𝐓𝐘 𝐋𝐄𝐆𝐒-JakeHoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora