🌸Memorias🌸/ Pausada Por Bloqueo Creativo En Esta Historia

#7

Se levantó de una y fue a buscar a alguien que los pudiera ayudar.

Mientras que Ambrosius se tapaba el rostro por la vergüenza que paso con el moreno.

"Que diablos me pasa?!"

Pensó Ambrosius golpeándose la frente una y otra vez.

— Mira si se está volviendo loco.

Escuchó decir, sabía de quién era la voz... Pero decidió no mirar.

— A si que te empezó a sangrar la nariz?

Hablo Luke.

— Si, me pasa desde ayer.

Mintió evitando algún interrogatorio por parte del más grande de los tres.

— Si como no...

Respondió viendo si había alguna herida.

Luke se fue, dejando nuevamente solos a los dos jóvenes.

— Que quieres hacer?

Pregunto Ball sentado al lado de su amigo.

— Te puedo cepillar el pelo?

Respondió viendo si no le quedan restos de sangre en la nariz.

— Claro, espérame un poco... Iré a buscar las cosas.

Hablo yéndose de la habitación. Ambrosius miro al techo y suspiro, todo era tan raro...

— Volví.

Anuncio la ya tan conocida voz de Ball.

— No te demoraste mucho...

Comentó sorprendido el rubio, el moreno sonrió y le señalo para que se sentaran el la cama de más joven.

— Ten, y eso no sé para que es... Ma- majestad lo usa pero no me ha dicho para que.

— Pues lo descubriremos juntos!

Anuncio feliz el desendiente de Gloriana.

El muchacho separó en dos partes el cabello de Ball, Ambrosius se sorprendió por lo suave que era.

— Es más suave de lo que se ve.

Pensó en voz alta, Valentoni lo miro de reojo para sonreírle, el rubio miro hacía otro lado intentando ignorar esa linda sonrisa.

De apoco los mechones de cabello negro eran trenzados y acomodados, al terminar Ambrosius le dió un espejo para mostrar su obra de arte.

— Y que tal?

Pregunto orgulloso de lo que había hecho en el cabello de su amigo.

— Te quedaron chuecas.

Dijo mirando ambos lados de las trenzas.

— A bueno, si te gusta nomás.

Respondió indignado. Ballister rio y se echó para atrás, miro a Ambrosius le volvió a sonreír, cuántas veces ya lo ha hecho?

— Prométeme que pasa lo que pase, siempre estarás para mí... Y yo para ti...

Hablo apenado, el joven rubio se sorprendió. Y tomo los cachetes de su amigo.

— Cuenta siempre conmigo, por algo somos amigos.

Respondió dándole una de las más típicas sonrisas bobas.