JIMIN Y LOS 3 MOSQUETEROS (YOONMIN)

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_ Se oyen como los Tres Mosqueteros–El rubio se rió. Los tres chicos lo miraron como sí estuviera loco, y así era, ¿no?–Tú podrías ser Athos–señaló al castaño, a Jin–Se nota que eres el mayor–Jin lo miró serio mientras que los otros dos J solo se rieron en voz baja–Tú podrías ser Porthos–Se refirió al tal J-Hope–Tienes el rostro altanero.

_ ¿Tengo el rostro altanero?–el peli morado observó a los otros dos J sorprendido.

_ A veces.

_ Y tú sin duda eres Aramis. El joven Aramis–le sonrió dulcemente al menor.

_ Y debemos suponer que tu eres el estúpido D'Artagnan–El castaño no estaba muy contento que digamos. A Jimin le encantó que el mayor supiera al fin de que estaba hablando. Al parecer había leído el libro–¿De dónde vienes, Jamie?

_ Soy Jimin, y vengo de Busan.

_ Entonces no eres de aquí.

_ Lo acabo de decir. Viajé de Corea hacia acá hace unas horas–El rubio sintió como sus mejillas rellenitas se pusieron rojas–Vine aquí a París por una nueva oportunidad.

_ ¿Y eso sería qué? ¿Volverte un mosquetero?–El castaño sonrió cuando los otros dos volvieron a reír a carcajadas.

_ Ojalá pudiera, Jin. Desde pequeño siempre quise ser mosquetero, pero como ya no estamos en el Siglo XVII, entonces quiero ser un gran guardaespaldas.

_ ¿Tú? ¿Un guardaespaldas?–El peli morado le sonrió altanero. Altanero como Porthos–¿Para quién?

_ ¿El CEO más importante de París y la industria musical?–El rubio se sonrojó un poco más–¿Min Yoongi?

Los 3J se miraron entre ellos. Ya lo perdimos, pensó el menor.

_ Llevas apenas unas horas aquí, y ya París te afectó el cerebro. ¿Eh, Jimin?

Arrugué las cejas cuando el tal J-Hope me hizo esa suposición burlona.

_ No. No tengo afectado el cerebro–dije–Mi papá fue un importante guardaespaldas, y yo quiero ser como él.

_ ¿Tu papá trabajó alguna vez aquí en París, Jamie?

_ Ya te dije que soy Jimin, Jin. Y no, mi papá jamás trabajó aquí, pero...

_ ¿Entonces por qué viniste aquí a París?–Bueno, Jungkook era muy tierno pero muy despistado y sordo.

_ Parece que no me prestaron atención a nada de lo que les dije–Puse los ojos en blanco y aparté la mirada de esos tres–Estoy aquí, porque quiero ser un guardaespaldas, y porque quiero proteger a Min Yoongi.

_ Uh. Yo lo veo difícil, amigo mío–J-Hope me miró con pesar. Aunque después vi que en realidad me estaba mirando de forma altanera–Min Yoongi es un magnate, y es más rico que el maldito Rey de Francia Luis XIII.

_ Oh, sí. He leído ciertas historias de ese rey. Él era...–Guardé silencio cuando vi que Jin me estaba mirando mal. Arrugué más mis cejas y jugué con mis manos–No entiendo cuál sería el problema de trabajar para...

_ Que Min Yoongi no se conforma con cualquier cosa, Jimin. Muchos menos con cualquier persona–J-Hope sí que daba algo de miedo cuando estaba molesto. No lo conocía muy bien, pero sí descubrí alguna parte de su personalidad–Sí sabes que es un tipo importante, entonces también sabes que requiere de gente experta.

_ Seguramente está buscando tipos rudos y grandes que sean capaces de proteger su vida y la de su equipo de trabajo.

_ Bueno, yo soy muy rudo. Sí, no soy tan alto como debería, pero...sí soy muy fuerte y muy valiente–Los tres se burlaron de mí–Lo digo en serio. He entrenado para esto desde que era niño.