𝐏𝐀𝐑𝐈́𝐒

𝐂𝐀𝐏𝐈́𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟒𝟐

𝟏𝟗 𝐝𝐞 𝐌𝐚𝐲𝐨 𝐝𝐞 𝟐𝟎𝟏𝟗
𝐂𝐚𝐧𝐧𝐞𝐬 - 𝐅𝐫𝐚𝐧𝐜𝐢𝐚

𝐃𝐚𝐧𝐢𝐞𝐥

Llevo más de una hora tratando de colocarme el moño, pero sin Melie esto es imposible. Ella siempre se encargaba de estas cosas y disfrutaba tenerla cerca de mí mientras lo hacía.

Ahora tengo que recurrir a Nico para que me ayude y es un poco incómodo.

ーQuerido, te ves muy guapo ーel alemán imita el acento español de Melie y no puedo evitar reír ante lo mal que le sale.

ーSólo haz el moño, no el acento de Melie.

ーSi no te hubieras comportado como un idiota, ella estuviera aquí.

No tengo derecho a enojarme ya que llegamos a un acuerdo: Nos llevamos como los buenos amigos que somos dejando a un lado todo el tema de Melie, pero él puede molestarme cuando quiera y yo no me quejo. Así que acepté.

Ya listos, antes de irnos nos tomamos una foto en el espejo y sinceramente es algo que extraño hacer con Melie. Ella adora tomarse selfie's frente al espejo y adoraba verla mientras lo hacía, todavía conservo unas cuantas en mi teléfono. Ni siquiera he sido capaz de borrar las publicaciones de instagram...

En el camino del hotel hacia donde será la alfombra roja y la proyección de Once upon a time in Holywood, me preparo para ver a Melie y quién diría que de pasar a planear asistir juntos este día, íbamos a ir cada quien por su lado y seguramente vamos a parecer como dos extraños.

Pero lo que veo en el teléfono de Nico me desanima más de lo que estaba:

ーLo importante es que ella sea feliz, hermano...

ーLo sé... Que irónico ¿No? ーtrato de sonreír un poco, pero creo que se ve más bien como una muecaー Al final ninguno de los dos se quedó con ella.

Nico se queda callado y el viaje transcurre en silencio. Al llegar comenzamos nuestro paso por la alfombra roja y parece como si todo se detiene con la llegada de Amelie.

Los fotógrafos se enfocan en ella y yo me quedo petrificado al ver lo preciosa que se ve. Todos los días lo está, pero hoy... Ni siquiera encuentro las palabras para describir su belleza, si en la cena de hace días atrás se veía deslumbrante, hoy es una hermosa estrella que alumbra todo el lugar.

Saluda a varias celebridades que conoce y posa para los fotógrafos con esa hermosa sonrisa que me enamoró desde esa noche en el club de Mónaco. No escucho, ni presto a atención a nada que no sea ella. Nico también se encuentra en la misma situación que yo y nuestros acompañantes tienen que pellizcarnos para hacernos volver a la realidad.

ーElla es un ángel...  ーsuelta Nico.

ーCaída del cielo ーcompleto por él.

Creo que esto ya se volvió costumbre desde al año pasado cada vez que Melie hace su maravillosa entrada en cualquier lugar. No importa lo que pase, Nico y yo siempre vamos a quedar sin palabras ante la belleza de Amelie Fontaine.

Luego ella se acerca a dónde está Nico posando para la cámara y hace una posa que nos hace sonreír de ternura a todos. Cuando el piloto alemán se da cuenta, ambos se abrazan como si no se hubieran visto en años.

ーHola, Daniel ーtomo su mano y sonrío al sentir su tacto.

Nos piden una fotografía y por más que quisiéramos, no podemos negarnos. Lo que me decepcionó, pero cosa que esperaba es que Melie no se queda a mi lado, sino se cambia para salir junto con Nico en la foto.