Spreen había Sido levantado a las 5 de la mañana por los sirvientes del castillo. Debía prepararse para recibir a su supuesto prometido. Que paja (flojera, creo). Acomodó su cabello en el espejo y se puso sus lentes de sol, hechos especialmente para él, a medida. Se miró al espejo y gruñó, sus padres le había escogido una ropa formal de las que él odiaba usar. Le gustaba más usar una ropa casual. Algo cómodo y simple. No esa ropa de estirados hippies que solían usar los de la realeza. Bueno, él era de la realeza. Pero odiaba su ropa.
En fin, había decidido que esto solo sería un capricho de sus padres. Esperaría unas semanas a qué se les pase la idea. Sus padres y hermano eran unos creyentes del amor verdadero y todo eso. No serían capaces de comprometerlo con algún príncipe desconocido y estirado. Ellos no serían capaces..... ¿Verdad?
Spreen no tenía suerte en el amor. Solo había tenido dos novios en toda su vida. Uno de nombre Shadoune, un beta. Pero él le puso los cuernos (le fue infiel) con un chico que Spreen no conocía. Jamás se lo ha perdonado. Ni lo hará tampoco. El segundo era Juan, mucho mejor novio que Shadoune. Cariñoso, tierno. De esos que solían aparecer en esos culebrones que a su hermano le gustaba ver. Un Omega muy tierno. Por mucho tiempo Spreen consideró marcarlo como suyo. Pero eso terminó el día en que se enteró que... Juan le estaba engañando con una chica del pueblo. De nombre Ari, una alfa. (perdóneme Juan y Shadoune cubitos. Los amo pero me habían falta traumas para el Spreen 😭😭)
En fin... Spreen ya no creía en el amor. Mucho menos en las almas gemelas. Esos solo eran cuentos para niños, para que creyesen en el amor eterno y esas basuras. Ese tipo de historias solo su hermano Missa se las creía. Pero él no. Sería un rey solitario
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En fin, ya estaban en el puerto esperando a que llegase el barco con los reyes de la Isla Quesadilla. Missa estaba emocionado. Esperaba poder conocer algo sobre aquella isla y quizás tener nuevos amigos. No tenía muchos. Solo a Mafer y a Philipp. Pero quería más. Muchos más amigos para compartir y hacer boberías. Spreen sólo pensaba "Que se acabe esto ya! Quiero ir a entrenar" y es que si, Spreen era tremendo masoquista que le encanta matarse entrenando hasta que su puños sangran por sostener tanto la espada.
—Ahi llegan — señaló su tío Willy (hermano de Vegetta cof- adoptado)
Un barco enorme recién había parado en el puerto. Ellos se encontraban a una distancia segura, esperando por sus invitados.
Spreen miró todo el barco y vió a un imbécil parado en la punta del barco tipo El Titanic
(Se me había olvidado decir que esta historia a pesar de ser de reyes y príncipes, ocurre en un ámbito un poco actual) y s una chica tratando de bajarlo.Su mirada se cruzó con otra mirada de color marrón con un brillo especial. Un chico castaño le observaba con curiosidad desde el borde del barco. Ambas miradas conectaron y sintieron como si el mundo se detuviera solo en ese instante, que solo estaban ellos dos. Spreen se sintió cómodo con esa aura, por primera vez en muchos tiempo se sentía cómodo. Su alfa aullaba de la felicidad frotando "Es él! Al fin!" Pero el azabache no me prestó mucha atención. Solo concentrándose en ese par de ojitos lindos.
Volvió a la realidad cuando su hermano jaló su brazo. Rumbo a dónde debían ir para darles la bienvenida a los reyes.
¿Quien era él?
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Surprise marriage {Sproier}
SonstigesEl rey Rubius y el rey Vegetta piensan que ya es hora de que su hijo siente cabeza y contribuya al bienestar del reino. Para ello, acuden con un viejo profeta que les indica la persona ideal para su hijo, el único ser en la tierra que podría ablanda...