Capítulo 8

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Luffy

Se movió incómodo, mirando a Law a través del sofá, en realidad a la pared junto a Law. Habían pasado un par de minutos desde que se sentaron y no sabía cómo empezar a hablar con el otro. "¿Quieres tomar algo?" Preguntó, y Law movió los labios. "Agua estaría bien".

Asintió y caminó lentamente hacia la cocina, llenando dos vasos de agua. Se mordió el labio nerviosamente, sabía que Law quería saber de él pero nunca había hablado de su vida con nadie. Ni siquiera Zoro lo sabía todo, sólo lo que había presenciado en sus años de instituto. Nunca había hablado de su pasado y no estaba seguro de poder hacerlo.

Respiró hondo y regresó a su salón, entregándole a Law un vaso de agua. "¿Qué quieres saber?" Exhaló mientras se sentaba. Law bebió un trago antes de fruncir las cejas, pensativo. "Mencionaste en una nota que te gusta estar encima de tus víctimas cuando matas. ¿Por qué?" Law se inclinó hacia delante, con los ojos brillantes.

"Me gusta sentir que tengo el control, supongo". Murmuró, y Law asintió. "Ya veo. ¿Qué te atrae de tus víctimas? Me he dado cuenta de que en la nota decías él y el cadáver que encontré también era masculino, ¿todos tus asesinatos son masculinos?". Law crispó los dedos y bebió un trago de agua.

"Todos tenían algo que me recordaba a mi padre, así que sí, todos son varones. Cuatro de ellos, para ser exactos". Se preguntó cuántos había matado Law, pero antes de que pudiera preguntarlo la cara de Law se tornó confusa. "Entonces, ¿es una manía tuya? ¿Te acuestas con los que matas? ¿Te sientes atraído por tu padre?" Los ojos de Law se endurecieron y negó rápidamente con la cabeza.

"Ni mucho menos, mi padre era un hombre horrible". Dejó el agua en la mesita junto al sofá y se miró los dedos. "Explícate". exigió Law, y tomó aire de nuevo. "Mi padre está muerto, pero toda mi infancia fui torturado por ese enfermo, me pegó y me violó hasta los diecinueve años. Podría decirse que mis asesinatos son una forma de desahogar mis sentimientos". Intentó mantener la voz uniforme, pero le temblaba al hablar. Respiró hondo, conteniendo su rabia.

La habitación permaneció en silencio y levantó la vista con cautela. El rostro de Law carecía de emoción y dio un respingo de sorpresa cuando el vaso que tenía en la mano se rompió. El agua se derramó sobre los pantalones, la camisa y el sofá de Law. La sangre se deslizó por el brazo de Law desde su puño cerrado.

Se quedó mirando estupefacto hasta que Law soltó la mano y dejó caer los trozos de cristal roto. "Perdona, ha sido una grosería". Law se puso rígido y se levantó de un salto. "Déjame coger un trapo". Se apresuró a entrar en la cocina y cogió un trapo y un recogedor.

Mientras recogía trozos de cristal, Law se afanaba en quitarse el cristal de la mano. No fue hasta que recogió el cristal y Law presionó el trapo contra su mano cortada que habló. "Lo siento si te he molestado". Volvió a mirarse las manos; Law no querría relacionarse con una persona tan repugnante.

"No estaba molesto contigo". Law respondió, y deslizó sus rodillas envolviéndolas con sus brazos. "Me rompiste el vaso". Murmuró y Law dejó escapar una pequeña risita. "Sí, como he dicho no estoy acostumbrado a este tipo de sentimientos. Era la primera vez que me enfadaba por alguien. Fue extraño..." Law se interrumpió y volvió a levantar la vista. ¿Law se enfadó por él?

"Me gustaría que me contaras más". Law continuó con su voz más suave ahora. "¿Qué hay de tu madre, tuviste hermanos?" Se alegró de que Law decidiera no seguir con el tema de su padre, aunque su madre y sus hermanos tampoco eran un tema precisamente feliz.

"Tuve dos hermanos, ambos de diferente padre; no los he visto en años, se escaparon de casa, no es que los culpe. Mi padre solía descargar sus sentimientos con ellos antes de recurrir a mí; no tengo ni idea de si están vivos. Mi madre era prostituta, nunca fue una buena madre, pero era mi madre". Tragó saliva, conteniendo su rabia. "Mi padre la mató, y eso es todo. No me queda mucho en este mundo". Law permaneció en silencio y apretó más las rodillas contra sí.

Atracción Fatal - LawluDonde viven las historias. Descúbrelo ahora