Atracción Fatal - Lawlu

Capítulo 15

Law

Luffy nunca podría abandonarle.

Recorrió con los dedos la columna vertebral de Luffy, contemplando aquellas palabras. Su relación había cambiado drásticamente en el último mes, y eso le sorprendía. Ahora se trataba de un asunto serio, y no estaba seguro de cómo manejar la situación.

No sabía qué hacer, pero sabía que Luffy no podía abandonarle.

Suspirando, se deslizó fuera de Luffy mordiéndose el labio al ver cómo Luffy se apretaba involuntariamente a su alrededor. Los ronquidos cesaron y Luffy refunfuñó antes de rodar sobre él. Al cabo de unos segundos, los ronquidos se reanudaron y salió de la cama.

Le había sorprendido gratamente lo increíble que era tener sexo con Luffy. Si hubiera sabido el éxtasis que traía consigo el sexo, tal vez lo habría intentado antes. No, la única razón por la que le interesaba el sexo era Luffy.

Pensó en las palabras que le había dicho a Luffy antes, en cómo le había dicho que mataría con él. Luffy había dicho que quería eso, pero ¿lo decía en serio o era sólo el calor del momento? E incluso si Luffy quería que matásemos juntos con regularidad, ¿estaría dispuesto a arriesgar tanto por Luffy? ¿Pero no había arriesgado ya tanto por Luffy al ayudar a matar al rubio?

¿Qué hacer? ¿Qué se suponía que debía hacer? Se giró y miró el cuerpo desnudo de Luffy. Un pequeño hilillo de su semen goteaba de Luffy a la cama. Debería haberse puesto un condón, ahora su ADN estaba por todo Luffy.

Pero, ¿realmente importaba? Sí, claro que importaba. Si Luffy se negaba a quedarse con él, tendría que matarlo, ¿no? Pero seguro que Luffy no le dejaría, no después de que estuvieran tan unidos. La confusión nubló su mente y caminó lentamente hacia el baño.

Después de limpiar a Luffy, deslizó una manta sobre el hombre más pequeño, que seguía roncando ruidosamente; no le sorprendió que Luffy hubiera permanecido dormido durante todo el proceso. Se acercó a la cómoda y sacó unos calzoncillos limpios; se los puso y colocó otros al borde de la cama para Luffy. Luffy podría ponérselos cuando se despertara.

Observó a Luffy dormir durante un rato hasta que un intranquilo vuelco de estómago le hizo bajar al sótano. El rubio muerto seguía en el lugar donde lo habían dejado y se agachó para comprobar el pulso del hombre. Estaba muerto, así que ¿por qué se sentía así? ¿Por qué estaba tan preocupado? Se apoyó contra la pared, respirando hondo, pero el desasosiego seguía creciendo en lugar de resignarse.

Luffy tenía que quedarse con él, vivir con él. No aceptaría nada menos; quería todo o nada de Luffy.

Luffy

Se incorporó alarmado, ¿por qué estaba desnudo? ¿Dónde estaba? ¿Se lo había llevado su padre a alguna parte?

Parpadeó, observó su entorno y la noche anterior sustituyó a sus preocupados pensamientos. Estaba en la habitación de Law y su padre había muerto. No tenía por qué estar asustado. Más que asustado debería sentirse feliz.

Feliz de haber podido conectar por fin con Law a un nivel tan íntimo. Feliz de haber disfrutado del sexo y de que Law pareciera disfrutarlo también. Feliz de que por fin se hubiera desahogado matando a aquel hombre.

Pero en lugar de felicidad, le invadió la conocida sensación de inseguridad: ¿dónde estaba Law? ¿Por qué estaba solo?

Lentamente se levantó de la cama, probando la sensibilidad de su cuerpo. Aparte de un poco de dolor se sentía bien, en realidad se sentía limpio. Alargó la mano para comprobarlo y frunció el ceño, confundido, cuando vio que su dedo estaba limpio.