Capítulo 21

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Law - 25 de Diciembre

"Mi familia es muy amable. No hay por qué ponerse nervioso". Reconfortó a Luffy, que miraba por la ventanilla del copiloto con las cejas fruncidas. Su familia era amable, la mayoría de ellos. Sólo había un miembro de la familia con el que Luffy temía encontrarse, y por suerte su madre le había confirmado que su tío no asistiría a las Navidades de este año.

Su pobre amante ya estaba agotado; no había necesidad de mencionar a un tío excéntrico que ni siquiera asistiría a la cena de Navidad de esta noche. "¿Y si no me consideran apto para estar contigo? Yo trabajo en una cafetería y tú eres cirujano. ¿Y si piensan que voy detrás de tu dinero?". Los ojos de Luffy se abrieron de par en par, y se preguntó qué otros pensamientos inquietantes estarían pasando por la cabeza de Luffy.

"A mi familia no le importará lo que hagas, ni quién seas. Eres el primer amante que he traído a casa. El único amante que he tenido, y sé que mis padres te adorarán. Me han estado preguntando sobre mi vida amorosa durante los últimos años. Estarán encantados de ver que he sentado la cabeza". Sólo podía imaginar la emoción de sus padres al conocer a Luffy; había mantenido su relación en secreto.

Sus padres pensaban que volvía a casa solo, y aunque no les gustara Luffy por la razón que fuera, él los apartaría de su vida. Si no podían aceptar a Luffy, tendrían que vivir sin él. "Vale, confío en ti, ¿podrías no dejarme solo?". Luffy tartamudeó, y se acercó para frotar el brazo de Luffy tranquilizadoramente.

"Estaré a tu lado todo el tiempo, no te preocupes amor. Lo harás muy bien". Sonrió con confianza, creyendo de verdad en sus palabras. Luffy lo haría genial con su familia, si hubiera tenido alguna duda nunca habría traído a Luffy para que los conociera. "¿Ya casi llegamos?" Luffy le devolvió la sonrisa, pero su voz seguía cargada de preocupación.

"Otra hora de viaje, pero la cena no es hasta las seis, así que pasaremos por mi casa para dejar el equipaje y refrescarnos antes de irnos". Miró el reloj; tenían mucho tiempo que perder.

Con suerte Luffy podría calmarse una vez que estuvieran fuera del coche.

..

Llegaron a su casa poco más de una hora después, y sólo tardaron unos minutos en meter las maletas desde el maletero del coche. Ni él ni Luffy habían empacado mucho, aparte de ropa y cosas esenciales no tenían mucho que llevar.

Luffy metió su ropa en la cómoda vacía de su dormitorio y entró cansado en el cuarto de baño. El viaje siempre le parecía más largo de lo que en realidad era, y se miró al espejo contemplando las oscuras bolsas bajo sus ojos. Parecían un poco más claras, debía de ser por volver a casa todas las noches a dormir con Luffy. Ya no se quedaba toda la noche en el trabajo; eso le iba a gustar mucho a su madre.

Después de lavarse la cara, salió y se encontró con una habitación vacía. ¿Dónde se había metido Luffy? "¿Luffy?" llamó, sin obtener respuesta. Suspiró y empezó a mirar a su alrededor, esperando que Luffy no se hubiera ido a lamentarse. Sólo quería crear un buen recuerdo con Luffy, no hacer que su amante se estresara.

Cuando vio que las primeras habitaciones estaban vacías, se preocupó un poco, pero no duró mucho, ya que abrió la habitación de su anterior quirófano. Luffy estaba sentado en la camilla, con los ojos cerrados como si estuviera ensimismado.

"Luffy". Lo llamó, y Luffy abrió lentamente los ojos. "Estaba pensando". murmuró Luffy antes de que pudiera preguntarse qué estaba haciendo. "¿Pensando?" Preguntó, y se acercó, colocándose entre las piernas abiertas de Luffy. "En lo que has hecho aquí, en lo que vamos a hacer aquí". Los ojos de Luffy brillaron de expectación.

"Ah, sí, ¿y cómo te hace sentir eso?". Sonrió con picardía, colocando una mano sobre el muslo de Luffy. Pensó brevemente en la última vez que había hecho esa pregunta, exactamente en esta habitación. Habían cambiado tantas cosas desde entonces.

Atracción Fatal - LawluDonde viven las historias. Descúbrelo ahora