Capitulo 3

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MATSURI P.O.V.

Al otro día nos levantamos, y después de prepararnos y desayunar, decidimos empacar y preparar todo para el gran viaje hacia el norte. Calculamos algunas cosas como distancias y cantidad de terreno, y en total nos dio una semana de viaje. Pero era demasiado.

Pudimos encontrar algunas cosas de valor y cambiarlas por caballos extraños. No sé como describirlos, pero eran fuertes, resistentes y rápidos. En ellos, el viaje tardaría unos 4 días. Seguía siendo mucho, pero al menos no eran 7 días.

- María, Darrel. - Harry los había encargado responsables de la comida.- ¿la comida ya está empacada? ¿Es suficiente para todos para 8 dias?

- Si, no molestes tanto. - Darrel, como siempre, estaba gruñón. Como le tiene envidia a Harry, es normal que sea así con él.

A mi y a Kate nos encargó de las cosas para dormir, y nosotras hicimos sleeping bags para todos. Él se encargó de los abrigos, ropas y herramientas que necesitemos allí. Como era mucho, decidimos cargarlo todo en los caballos extraños.

Pudimos conseguir una buena lupa y nos dimos cuenta que existen atajos en el mapa, por lo que a pie, el viaje de ida y vuelta serán 8 dias. Sigue siendo bueno.

Ese mapa era impresionante. A simple vista mostraba caminos, árboles, rios... bueno, lugares importantes. Pero si prestabas atención, si te acercabas y mirabas bien, por ejemplo, usando una lupa, podías ver atajos, casas... era tan increíble que podías ver el movimiento de los rios, de los arboles con el viento, hasta de personas.

Cuando todo estuvo listo, al fin partimos. Kate dirigía uno de los caballos y Darrel el otro, ya que ese tenía, en su mayoría, la comida. Todo iba tranquilo, hasta que pasaron las primeras 3 horas.

- ¡Estoy cansada! ¡¿Podemos detenernos?! - María fué la primera en quejarse.

- No, no podemos. Qué débil eres, solo llevamos unas horas. - Kate, siempre aprovechando una oportunidad para discutir con María.

- Discúlpame por no ser casi como hombre.

- ¡¿Me estás diciendo que soy casi como un hombre?!

- Basta, chicas. - Harry interrumpió. - María, descansaremos luego, no ha pasado tanto y debemos avanzar todo lo que podamos. ¿Podrías aguantar un poco más?

Ella bufó. - como digas... - y seguimos caminando.

Pasó casi todo un dia. El sol ya estaba casi ocultándose. - ¡me dijiste un poco! ¡Un poco! ¡Caminé todo un dia! Esto es abuso, ¡¿sabes?! ¡Abuso! - María estaba muy, muy irritada. Ni siquiera Kate quería discutirle al verla asi.

- Harry, ¿qué vamos a cenar hoy? - me acerqué.

- Cenemos pesado. Hay que restaurar las fuerzas de hoy y hay que dejar la comida más ligera para el dia de batalla. ¿Qué tienes ahí, Darrel?

- Pan, queso, jamones, creo que eso es carne de un animal parecido a la vaca, más panes, algunos víveres e hierbas para sazonar.

- Podríamos hacer estofado con los sazones, los víveres y la carne. - Kate opinó.

- ¿Puedes preparar estofado?

- Yo lo haré. - me ofrecí.

- Gracias. - Kate sonrió. Saqué todos los ingredientes y los preparé (nos habíamos llevado algunos calderos que encontramos en la casa). Al terminar, todos cenamos y nos acostamos al rededor de la fogata. Realmente hacía mucho frío.

No sé si era presisamente por el frío, ademas de otra cosa, que no podía dormir. Me levanté de mi "sleeping bag" improvisada y los observé a todos. Estaban dormidos.

La Princesa de la TorreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora