Tratando con Drama

Capítulo 42: Sus tatuajes: Parte 1

AN: A juzgar por el título, ¿quién crees que será en este capítulo? No importa, ¿verdad? Ya que lo leerás de todos modos justo debajo. Además, reescribí Hunting the Huntress, así que échale un vistazo. Reemplacé gangbangs con tentáculos ... khkhkh.

Hora: un día después

"A dónde me llevas, Thals?" Percy llamó a la hija hiperactiva de Zeus que lo estaba tirando.

¿Por qué las chicas estaban tan ansiosas por pasar tiempo con él?

"Cállate y sígueme, Jackson!" Llamó indignada, tirando más fuerte. "Es una sorpresa! ¡En caso de que no pudieras decirlo!"

Oh no, Percy podría decir que fue una sorpresa, ya que tropezó con otro ... algo en la acera, maldiciendo la venda de los ojos. Casi podía escuchar las risas silenciosas de los transeúntes, volviendo la cabeza para mirarlos, a pesar de la venda de los ojos.

Lo que resultó fue solo una expresión facial aterradora, que todavía era suficiente para hacer el truco, mientras corrían.

No tenía idea de lo que estaba sucediendo, excepto el hecho de que lamentaba haber invitado a Thalia a una cita.

Se había tropezado esa mañana, y después de registrarse con Calypso para ver que estaba bien por la mierda apasionada del día anterior, se había mudado para invitar a Thalia a una cita.

Se arrepintió en el instante en que ella corrió con entusiasmo a su habitación, ignorando las miradas celosas de todos los demás que podían ponerse al día con lo que acababa de preguntarle.

Se preguntó a dónde iban, pero a juzgar por los olores y sonidos que lo rodeaban, estaban en algún lugar del centro de Manhattan.

"Será muuuy bueno! He estado planeando para este día durante años, e incluso he confirmado todo a través de Iris Messaging, y arreglé todo..." Thalia continuó con entusiasmo, haciendo sonreír a Percy mientras tomaba nota de su lado más suave y femenino que brillaba a través de su exterior generalmente duro, emocionado solo por una cita simple.

Tropezó con algo otra vez, su atención se rompió con las lindas divagaciones de la niña mientras intentaba recuperar el equilibrio. "Thalia, baja la velocidad! Solo sigo ... ¡tropezando con cada jodida cosa en esta pequeña acera de mierda!"

Casi podía sentir varias miradas apuntando hacia él desde Ogygia después de su maldición.

Suspiró, mirando hacia el cielo, aunque no podía ver, ni sentir nada sobre el constante zumbido y la bulliciosa vida de la ciudad de mierda y los viajeros diarios que corren para llegar a todas partes a tiempo, sus pequeños horarios apretados lo más humanamente posible.

El polvo le picó ligeramente la piel, secándose los labios y arruinando su cabello ya desordenado. Podía sentir la sequedad en su lengua, y la necesidad de escupir el polvo en su boca se estaba volviendo demasiado tentador. ¡Estas cosas nunca sucedieron con arena en la playa! Sintió una gota de sudor fresca rodar por la frente por el calor de la ciudad, un calor sofocante y deprimente a diferencia de la temperatura en el clima tropical intacto de Ogygia.

Se preguntó sobre el pequeño y pintoresco pueblo en el que había estado con Hestia, después de Annabeth, un pueblo cuyo nombre nunca supo. Se preguntó si algún día sería así: el centro de Manhattan Versión 2.0.

Esta vez, llevaba mucha ropa más ligera, solo una camiseta negra de manga larga, Amon Amarth esta vez, y jeans ajustados ligeramente rotos con zapatillas casuales negras y rojas. La ropa abrazó su cuerpo cómodamente, mostrando sus músculos bien definidos mientras ocultaba la mayoría de sus cicatrices, y todos habían complementado su nuevo aspecto. Tenía un rastrojo de dos días que oscurecía su barbilla y su mandíbula bien definida nuevamente, y sus ojos brillaban con un nuevo entusiasmo sobre todo lo que había negado durante tanto tiempo.