Johnny (JohnMark)

Tres

—¿Crees que estaba diciendo la verdad? —Jaehyun miró hacia la casa de Johnny. Nunca había conocido al hermano mayor de los Seo como un mentiroso. Johnny era un montón de cosas, hosco, corto de paciencia, un golpeador de cabeza cuando era necesario, sobre todo si se atravesaban en su camino, pero él nunca había sido un mentiroso.

—Por la forma en que nos amenazó, —dijo Jeno—. Tiene que serlo.

Jaehyun soltó un bufido. —Johnny nos amenaza todo el tiempo.

—Sí, pero no así, —dijo Jeno—. ¿Viste la mirada en sus ojos?

Jaehyun lo había hecho. Miró alrededor de la hoguera. — ¿Adónde se fue Changmin?

—Ni idea, —Jeno se encogió de hombros—. Pero es mejor vigilar las cosas. Si Changmin descubre que el humano está aquí, no sabemos lo que hará.

Si Changmin se acercaba al compañero de Johnny acabarían enterrando a su padre. Changmin podía ser el hijo de perra más malo que caminaba por la tierra, pero Johnny había entrado en lo suyo y Jaehyun vio el leve temor que entraba en los ojos de Changmin cada vez que Johnny se enfadaba.

Los vientos estaban cambiando. No solo uno de ellos finalmente encontró a su compañero, sino que el liderazgo también cambiaria pronto. A decir verdad, Jaehyun odiaba a su padre abusivo con pasión. Changmin había hecho cosas indescriptibles, pensando que era el rey de la tierra.

En opinión de Jaehyun, un cambio de régimen era necesario desde hacía mucho tiempo. 

🐻🐻🐻

Johnny vio el miedo en los ojos de Mark. Su compañero tenía la intención de superarlo. Estaba preparado para perseguirlo, pero justo cuando Mark se volvía hacia la puerta se tambaleo hacia atrás, apoyando la mano en la barandilla. Su piel se ruborizó mientras su polla se endurecía.

—Me voy a cortar las pelotas por hacer esto. —Mark se sentó en los escalones abanicándose.

El baño había sido una solución temporal. Mark se calentaba de nuevo. Una vez más Johnny se maldijo por precipitarse. Podía ser salvaje y dominante, pero no era un bastardo. Al menos no lo creía. Sus hermanos podrían argumentar lo contrario.

Johnny gruñó cuando oyó un ruido fuera. Se dirigió a su puerta y la abrió. Sunghoon y Jaehyun estaban de pie en su porche, mirando a todo menos a Johnny. —Creí que les había dicho que se fueran.

—No puedes evitar que estemos curiosos, —dijo Jaehyun.

—Mark no es un espectáculo. —Johnny miró a su alrededor para asegurarse de que Changmin no estaba a la vista.

—No está aquí, —dijo Jaehyun—. Jeno se está asegurando de que se quede lejos.

Como si Jeno pudiera evitar que su padre hiciera lo que él quería. Cuando Changmin fijaba su mente en algo, nada lo detenía. —Dale las gracias a Jeno.

Jaehyun arqueó las cejas. —¿Estás seriamente siendo amable? —Sunghoon empujo a Jaehyun con el codo—. No empuje al oso cuando esté en celo.

—No estoy en celo, —dijo Johnny. Había estado luchando contra sus impulsos temiendo lastimar al humano, pero la verdad era que estaba tan duro que podía clavar clavos con su polla—. Ahora váyanse a la mierda.

Cerró de golpe la puerta, esperó un segundo y luego la abrió de nuevo. Sus hermanos todavía estaban allí. Jaehyun tenía una sonrisa burlona en su rostro mientras Sunghoon sonreía.