•~ DIESCISEIS ~•

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¿A dónde vas?— como de costumbre, Hirving se sentó sobre la ahora cama matrimonial que Edson había comprado, a las 6 am.

Álvarez terminaba de abrochar sus tenis. Después se incorporó hasta caminar a la cama donde su omega de casi 8 meses, bostezaba al mismo tiempo en el que tallaba sus ojos.— Mi Hirving, es momento de que me vaya a la universidad...

¿No me despertaste?— se preguntó el omega qué, se suponía también debía ir.

Edson suspiró — en dos semanas cumples 8 meses de embarazo, pensé en que quizás quisieras descansar... recuerda que tus maestras y profesores son muy considerados contigo, puedes descansar de aquí a que nazca Andrea.— Ahora Edson se había sentado en la cama junto a Hirving.

Lozano asintió — realmente sí me siento agotado, cariño. Pero aún así, debiste despertarme, te haré algo para que desayunes— y alejó la cobija que le cubría de inmediato. Su vientre era más grande que antes, además de muy pesado, ni siquiera podía dormir de lado, simplemente boca arriba y le costaba trabajo ponerse de pié solo.

No te levantes, mi omega, yo puedo hacerlo, mejor tú y mi pequeña descansen, papá se va a encargar de eso— a pesar de sus intentos, Edson no tuvo más remedio que ayudar a Hirving a ponerse de pie.

Voy a hacerte un lonch para la escuela— sonrió entusiasmado— ¿te gustaría también llevar algo de café?, tus clases inician a las 7:30, y en el auto llegarás en menos de 10 minutos.

Eres tan especial, Hirving — los labios del alfa dejaron un suave beso en las mejillas de Hirving. Este sonrió sintiéndose como de costumbre, muy calmado.

Ambos salieron de su habitación en dirección a la cocina.

Cuando cumplas 8 meses seguramente podrán programar tu cesárea, no te preocupes por los gastos claro, solo hazlo por la maleta en caso de emergencia. — Edson mientras su omega encendía su estufa, sacaba las cosas del refrigerador.

Lozano volvió a bostezar bastante largo y amplio. Después talló sus llorosos ojos.

De verdad ve a dormir mi omega, estoy bien— el alfa abrazó a Hirving quién, se acomodó en su cuerpo entrecerrando sus ojos.

Tú haz hecho mucho por mí y por Andrea, permíteme hacer algo por ti, cariño.— Sonrió Lozano pues, pronto comenzó a tomar más energía para preparar el lonche a su alfa... una vez en 5 meses no le hacía daño a nadie.

[...]

Basura, basura— Lozano cambiaba los canales de la tv nueva recién comprada, de la sala. Las 8 am se hicieron presentes junto a la luz y un desayuno nutritivo de fruta y pan con aguacate que el omega degustaba.

Andrea, ¿te gustaría esta noche cenar algo de pollo?, quizás podamos ir a un restaurante, papá es bueno eligiendolos— sonrió después de beber algo de juego de naranja natural, y sobar su vientre.

Pronto la puerta del departamento fue tocada.

Hmm— Lozano arrugó el rostro— ¿será importante?, si no es así, no debería molestarme en abrir. Estoy agotado...

Pero la puerta volvió a ser tocada...

Pronto una sensación de incomodidad hizo que Hirving se alertara. Su instinto de protección lo hizo fruncir el ceño pues, presentía un peligro en la puerta...

Se levantó rápidamente y la abrió...

¡... Andrés!— dijo respirando con calma el omega. Su mejor amigo sonrió al verle.

Vine a verte porque no fuiste a clases y no me avisaste— explicó entrando en la vivienda departamental de Hirving y su alfa.

Lozano lo invitó a sentarse— lo siento, estuve muy disperso, ya casi nace mi pequeña Andrea y he estado pensando mucho en eso...

Andrés asintió sonriente. Andrea era en honor a él, aquello lo hacía sentir feliz; sin embargo...

Hirving, hacía algo de tiempo que quería preguntarte algo... algo que he estado pensando. Es sobre Andrea...— exclamó el rizado omega, muy nervioso.

Hirving arrugó su rostro en confusión — ¿qué debería yo saber sobre mi hija?— se cuestionó con naturalidad.

Andrés suspiró sintiendo su garganta seca...

Yo recuerdo que...

Ah— un dolor punzante hizo a Andrés detenerse pues, Lozano se tocó el vientre. — Lo siento — rió recobrando la calma.— Andrea normalmente me patea bastante, eso cuando no esta su padre.

Andrés sonrió falsamente...

Pero bueno, ¿qué recuerdas?— recobró la charla, Lozano.

Andrés aguardó algunos segundo silencio... después negó sonriente— nada Hirving, era sobre la escuela, un proyecto, pero no quería preocuparte con eso, los profesores son comprensibles contigo.

Oh— Hirving asintió tranquilo— bueno, siendo así, ¿te gustaría desayunar?, hay café, jugo, fruta y algo de pan. Ya sabes, todo nutritivo por tu sobrina — y se sobó el vientre.

Andrés asintió — claro, regresaré a clases en la siguiente hora, por ahora, hablemos.

Lozano asintió poniéndose de pié. Andrés lo siguió a la cocina.

Por lo visto, tu hijo ya casi nace— Guillermo se sentó sobre la mesa donde Edson comía el lonche que su esposo le había hecho

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Por lo visto, tu hijo ya casi nace— Guillermo se sentó sobre la mesa donde Edson comía el lonche que su esposo le había hecho.

Suspiró dejando la fruta para después y guardó todo bien.— Qué te importa, maldito.

Oye— Guillermo alzó sus brazos al aire— has de saber que estoy en una relación, ya no me interesa lo que tú y ese omega hagan. Acepté que no puedo ser padre, soy muy joven.

Y muy idiota. Me parece excelente que hayas aceptado que soy el padre de And... nada.— Edson no anhelaba revelar ni nombres y menos información sobre su hija.

Guillermo sonrió.— ¿Te gustaría olvidar el pasado?, podríamos ser amigos nuevamente.

Ni loco, ni siquiera lo pienses, no va a suceder.— Y se puso de pié el padre de Andrea junto a su mochila; Guillermo también se levantó.

Bueno, pero disculpame.— Asintió rascando su nuca apenado— lo digo en serio, ya no me interesa Hirving, y menos tu hijo.

Edson asintió sin decir más palabras, simplemente se alejó caminando con su almuezo a medio acabar.

Prometo que en cuanto llegues al mundo, Andrea, te llevaré a ti y a tu padre a un mejor lugar, lejos de él... de cualquiera que pudiera dañarlos.— Susurró de camino a su salón para, ahí terminar de degustar lo que su omega le habría hecho con mucho amor.

Guillermo observó como Edson se alejaba...

¿Tú su padre?— rió negando.— Ni lo sueñes, Edson...— susurró molesto sin dejar de mirarlo.

— susurró molesto sin dejar de mirarlo

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𝑬𝒍 𝒄𝒂𝒄𝒉𝒐𝒓𝒓𝒐 𝒅𝒆 𝒑𝒂𝒑𝒂́.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora