El sol del elemento luna

5. ¿Té?

En el lado contrario y separados por un puente de madera que dividía el lago ChangZe anunciaba a Fengmian su victoria absoluta.

–Lo hice, le gané al heredero Wen, espero que esté confesando ahora mismo.

Fengmian no respondió a tales palabras, en su lugar mantuvo la cabeza gacha. Estaba enojado con sus amigos y tenía unas fuertes ganas de regañar a ChangZe, ya que después de todo no podía decirle nada al heredero Wen, Qiren se encargaría de él.

–Bien, sabes que no tome la mejor decisión, pero de no haberlo hecho esos dos nunca cederían. Y tengo un regalo para ti.

–Al menos eres consciente de que has tomado una mala decisión... ChangZe, si RuoHan no se quiere confesar, no lo hará aun si está siendo amenazado.

Hablo Fengmian ignorando la mención del regalo y paso su mano por su rostro, al menos estaban en un sitio tranquilo alejados del bullicio.

ChangZe por su parte ignoro el regaño y, saco el obsequio del mayor, al sacarlo de sus mangas un destello se escapó. La luz de la luna y la de cientos de linternas se reflejaron en una superficie vidriosa hasta que, con el ángulo correcto, el interior de aquel objeto se hizo presente.

–Como heredero de Yummeng tienes muchos barcos, pero ninguno te lo dio tu fiel sirviente. Por favor, acepta este regalo como muestra de mi fidelidad.

ChangZe hizo una pequeña reverencia y extendió las manos hacia el heredero con respeto. No podría levantarse a menos que recibieran su regalo.

Fengmian se cruzó de brazos ignorando la presencia del Wei, sin embargo, la curiosidad le ganó por aquellas palabras. Mirando de reojo lo que su amigo sostenía.

–ChangZe...

El Jiang dudo un poco, pero al final termino por tomar con sumo cuidado aquella botella, la elevó hasta la altura de su rostro viendo fascinado el barco que estaba dentro.

ChangZe oculto una pequeña sonrisa de la vista del joven heredero cuando esté recibió él regaló.

–ChangZe... Tú...

El líder Jiang trago saliva y bajo el obsequio. Al oír su nombre ChangZe levanto la vista sin permitir que la posición de reverencia se perdiera. A Fengmian no le gustaba que las personas hablarán sin terminar sus frases, pero está vez el mismo lo estaba haciendo. El heredero de Yummeng debía estar dudando de sus palabras.

El joven sirviente no dijo nada, solo espero pacientemente para escuchar unas palabras que tal vez llegarían o tal vez no.

Al final, las palabras llegaron.

–Tienes que estar a mi lado siempre ¿Entendido?

El tono de voz que uso Fengmian fue uno firme, pero con un ligero toque de anhelo.

–Entendido.

ChangZe se inclinó sistemáticamente al recibir una orden. Arrodilló su cuerpo en señal de sumisión, así como inclino su cabeza, pero no por respeto, sino por vergüenza, puesto que un rostro caliente podría delatarlo.

Fengmian soltó un pequeño suspiro mientras miraba las acciones de su amigo, un poco molesto por aquella reverencia, no le gustaba, pero aun así prefería eso a que viera lo rojo que estaba su rostro, había dicho algo realmente vergonzoso.

Cuando se sintió más tranquilo le dio un pequeño golpecito en la cabeza a su amigo antes de obligarlo a levantarse. ChangZe actuó un gesto sordo de dolor con su rostro, se levantó a duras penas, no quería que su rostro fuera descubierto, pero no había opción.