29. Presagio de un desastre.

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En la Mazmorra ubicada bajo el castillo

Efendi: -realmente molesto-
Siempre creí que los Swampert que salieron del reino habían perdido su gema. Y ahora resulta que alguien la encontró

Morton (Malamar): esa gema paso siglos perdida

Efendi: ya la daba por perdida

Morton: ¿De que te preocupas?
Los dragones ya no están aquí.
Jamás usarían un deseo de la gema para reclamar el reino como suyo
Y seguramente la gema del descendiente de Swampert la tiene algún loco como diamante normal.

Efendi: ¿eres imbecil o solo te haces el tonto?
Con la gema del Swampert teniendo portador, eso hace que las demás gemas otorguen un deseo a dicho portador ya que eso las activa.
Si los dragones se enteran de eso,  podrían usarlo para pedir algo.
Mi descendencia le ha servido al linaje de los Gardevoir y Gallade por muchísimos años. Y deseo que mi estilo de vida con privilegios en el palacio continúe.

Morton: y lo hará, mientras la princesa sea una variocolor no hay problema.

Efendi: si, tienes razón.
De ese problema ya no me preocupo.
Aun así, hay otro problema

Morton: ¿Cuál?

Efendi: -viendo hacia una pared que tiene inscripciones-


La leyenda dice que los tres Guardianes; Zeraora, Latios y Celebi otorgaron unas gemas capaces de otorgar un deseo.
Dichas gemas representan su poder.
Y que dicho poder estará siendo juzgado por aquel que vigila desde las sombras. Y castigará a la región entera si alguien se atreve a darle mal uso.


Efendi: de ser así.
¿Quién tiene la gema de Swampert?
Se que los dragones jamas harían algo semejante pero;
¿Qué hay de la última gema?
Nada nos asegura que no será usada para algo siniestro

Silencio

Morton: mientras la princesa tenga la gema de la descendencia Gardevoir, nada malo pasará

Efendi: tienes razón. La gema solo cumple deseos a pokémon fuertes y mayores. Esperemos que quien tenga la gema restante, la vea cmo un simple diamante o roca.



Una extraña platica en un lugar oculto del castillo.


La familia del Medicham, Efendi, siempre ha servido al reino y ha cuidado de los reyes y reinas Gardevoir, velando que sus descendientes siempre sean variocolor.























El día llega a su ocaso, y el ocaso da paso al anochecer.

Una brisa helada envuelve al bosque, y tres pokémon parecen estar algo preocupados.









En las montañas, sintiendo como un poco de nieve cae sobre sus hombros, el Zeraora medita.

Zeraora: ha pasado mucho tiempo desde que las gemas fueron utilizadas, y jamás pensé que fueran utilizadas por solo unos infantes -dice lo último un poco molesto-



















En el bosque, sobre la copa del árbol está un pokémon meditando

Celebi: sus corazones fueron capaces de  activarlas, a pesar de ser pequeños y débiles
No creo que debamos preocuparnos.

















Pokémon Historia: OrígenesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora