Pokémon Historia: Orígenes

38. Los dragones de la Montaña Elevada

El curso de esta historia va en nuevo rumbo.

Yoí y Nibble, ahora en compañía de sus padres Millo y Tyrantrum;  Zero el Dragapult, y Dan el Flygon los acompañan y están en camino a la Aldea de la Montaña Elevada, una Aldea de pokémon tipo dragón.

Narra Yoí.
Han sido días cargados de emociones para mi. Salí de mi hogar, dejando atrás a quienes he considerado mi familia, Farah y Hax.
Aunque a decir verdad, ya se que Farah es mi madre, y que todo este tiempo me oculto esa información porque Hax así lo había ordenado, aunque, no creo toda esa información sobre el señor Hax.
Ahora, solo me puedo concentrar en mi viaje en compañía de mi padre Millo, y mi amigo Nibble.
Creo que yo y Dan somos demasiados extraños en comparación a al resto del grupo. Parece ser que somos los únicos  dragones salvajes que no comemos carne de otro pokémon, aún, aunque este sea permitido.

Millo: --con Yoí a su lado--
Imagino que esta dieta que tienes es producto de Hax, ¿No es así?

Yoí: así es. Todos los dragones de la Aldea nos alimentamos a base de bayas y vegetales.

Millo: no creo que pudiéramos sobrevivir a base de eso.
Pero respeto eso de ti y te admiro

Yoí: --confundido--

Millo: porque eres firme a tu ideal
Respetas toda la vida pokémon

Yoí: --se avergüenza--

Millo: perdón por ser un padre algo... salvaje

Yoí: pero eres mi padre, y también quiero aprender de ti
--se apega a él--

Millo: --feliz--

Aunque mi padre y yo seamos diferentes en ese sentido, realmente lo admiro y deseo aprender mucho más de él. Es muy fuerte, quisiera entrenar con él.

Millo: --derrotando a Zero--

Zero: me rindo, me rindo, esta bien
No lastimes a mis Dreppy

Dan: aún falto yo
--le acerta un Garra Dragón--

Millo: aún necesitas más poder
--le devuelve el ataque--

Quiero aprender más y más de él.... pero, aún hay algo dentro de mí que no está muy tranquilo.

Mientras el grupo continúa su camino, un extraño sonido llama su atención.

Yoí: ¿Qué es ese ruido?

Nibble: papá, ¿será posible?

Tyrantrum: así es, nuestra Aldea
Al fin hemos llegado

Nibble: sii --corre--

Yoí: espera, Nibble --lo sigue--

Y frente a ellos, la entrada a la Aldea.
A diferencia de la Aldea de Yoí, esta no tiene cerca cuevas, pero tiene algunas clases de construcciones que asemejan casas.

Yoí: es increíble

De repente, un Noivern vuela hacia ellos

Noivern: ¡Bienvenido de nuevo!

Yoí: ¡Dash! ¡Dash eres tú!
--con lágrimas en sus ojos--

Noivern: --va directo al Tyrantrum--
¡Qué bueno que estas de regreso!