capítulo VII "Ahora te recuerdo..."

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Douma tenía que ir a recoger a Shinobu a la Universidad, según su madre es lo que hacen los novios, preocuparse por su chica pero aquí sabemos que quien flechó al Tenjou fué aquella chica de ojos verdes. En fin, ella no quedó tan contenta al ver quien era el que la venía a recoger, se despidió de sus amigas para entrar al auto, en el trayecto no habló ni una sola oración, solo se mantenía mirando la ventana y el paisaje que estaba detrás de esta. Douma extrañado la miraba pero decidió no decir nada y seguir normal. Llegaron a su departamento donde cada cual decidió en hacer lo que les tocaba, ella estaba dándose una ducha y él estaba en la sala viendo televisión, más un chillido lo asustó y alarmó, corrió rápido hasta el baño abriendo la puerta de un manotazo, Shinobu se cubrió rápidamente al escucharlo entrar.

¡Maldita sea contigo!

–¿ahora que hize?

¡Sal ahora mismo del baño pervertido!

–Vine porque pensé que te había ocurrido algo pero veo que estás bien

No no no, ey ey espera no te vayas

–¿Ahora qué?

Es que...hay una araña en la bañera

Dijo ella estando al lado de él mientras decía aquello titubeando un poco, la verdad es que no le agradaban tanto esos animales. Douma soltó una risa divertida al punto de hacerlo llorar pero porque se estaba riendo, ella lo Miró enojada y seria y él se quedó callado. Douma sacó al animalito (ya que era una araña pequeña) y lo puso en un frasco de cristal blindado, lo colocó encima del repicero de la cocina así evitaría que se escapara. Volvió al baño para recortarse al marco de la puerta, la misma estaba cerrada porque Shinobu estaba dentro, ella terminó en cambiarse y salir del baño así que Douma se hizo a un lado.

Vaya araña tan grande la de la bañera–

Tch, cállate

Ahora sabía con qué podría molestarla o jugarle bromas. Este soltó una pequeña risa interna para dirigirse a la cocina para preparar la cena. Ambos estaban sentados y en silencio, uno algo incómodo, sin un tema de conversación y la chica decidió en soltar un bajo suspiro para mirarlo.

Siento que te conozco de algún lado...

–Ahora tocando el tema, yo creo que también te conozco–

Que raro ¿no?
(Pero su cara y su personalidad...será que)
¿Douma eres tú?

–Shinobu, entonces eres la Shinobu que conocí cuando era un niño, ahora te recuerdo

–Sí, y me debo de imaginar que también recuerdas esa promesa que me hiciste ¿no? Esa promesa que jamás cumpliste ¿la recuerdas?

–Yo te había dicho de que mi padre había conseguido un nuevo trabajo aquí en Tokio por eso es que debí de irme...perdón–

Ella no dijo nada más se levantó de la mesa y dijo "se me quitó el apetito, provecho" marchándose de ahí para la habitación. Douma soltó un suspiro bajo y mirando el plato de la comida de él quedaba pensativo, quizás el remordimiento seguía en ella. Mañana siguiente cual había sido nublado al parecer hiba a llover pero no le importaba mucho al Tenjou, se la pasó un poco desanimado por las palabras de ayer que ella le había dicho, Kotoha notando esto y preocupada decidió en preguntarle sobre qué pasaba así que el Rubio decidió contarle. El transcurso del día fué normal, hoy él decidió en no irse en auto sino más bien caminando. Comenzaba a llover por lo que abrió el paraguas para no mojarse, caminaba mientras veía su celular atentamente y chateando con Hakuji quien le andaba pidiendo por escrito que le avisara cuando llegue a casa. Sinceramente el Tenjou apreciaba mucho la preocupación de Hakuji aunque este le dijera que le daba igual. Continuó caminando hasta que escuchó una voz de un niño hablando con alguien, provenía de un callejón donde se encontraba ahora.

Reencarnando en el presente, mirando al futuro╭DouKoto╮Donde viven las historias. Descúbrelo ahora