¡Rubén, Abre Los Ojos !

17

Los chicos  reían mientras pasaban entre los callejones, Samuel y Rubén eran prácticamente inseparables y esto para manuel no pasaba desapercibido

Finalmente entendía el ambiente

— oigan tortolitos, ¿que les parece si nos damos apodos?

— ¿Apodos? — pregunto extrañado el azabache

— tu ya tienes uno , Lolo — dijo riendo el  albino

El de cabellos naranjas comenzó a reír y atrapó al más joven entre sus brazos intentando hacer que dejara de llamarle por ese extraño apodo que se habían puesto hace años atrás

Sin embargo el azabache se interpuso entre ambos , dejando al menor detrás suya, dando una mirada desafiante

— tranquilo, no. Estoy haciendo nada —  el zorro observó a su alrededor para calmar el ambiente y pudo divisar un montón de cajas con unas letras en ellas — hey que les parece esto

  Los dos chicos miraron atentamente al zorro

— veg...etal...mmmmm....¿Que te parece vege?  — dijo de forma burlona al de cabellos oscuros — te gustan los vegetales, es un perfecto apodo para ti , Samuel.

El azabache le observó con odio y se dispuso a irse , no toleraba este comportamiento

—creo que suena lindo — dijo el albino sonriendo — aunque vege es algo simple ¿Que tal Vegetta?

— por mi está bien 

— hey... ¿porque conmigo te ofendes y con rub no?

— porque a mí Rubén me cae bien

—¡Que cruel!— exclamó el zorro

Escuchando las risas de los demás se dispusieron a ir en dónde habían dejado a los adultos minutos antes

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— gracias Akira , hasta aquí puedes dejarnos, ya sabemos cómo llegar

— siempre será un placer ayudarles

Dicho esto la chica hizo una reverencia y volvió a irse por dónde habían llegado segundos antes

Los jóvenes rápidamente hicieron carrera hasta llegar a la casa de Borja en dónde comenzaron a golpear como locos , pues dos de ellos no habían visto a Miguel desde hace meses atrás

— pueden dejar de hacer tanto ruido , ¡por dios!— la chica salió con la escoba enojada— ... — un portazo llegó a la cara de los dos

— hay vamos nieves nunca estamos aquí, abre la puerta porfis — Rubén comenzó a chillar para intentar llegar al corazón frío de su hermana mayor

Esto causó un dolor horrible en el pecho de Samuel , nunca había escuchado  el chillido de Rubén, si bien no era un sonido fuerte ni molesto
para el era desgarrador, no quería volver a escucharlo en su vida
Y  de no ser por la chica que volvió a abrir la puerta le hubiera gritado al oso para que dejara de hacer eso.

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— el señor Borja no está, por lo que tengo entendido fue con Miguel a buscar una cura — explico la chica barriendo el piso de madera—. Y no creó qu.. ¡Baja los pies de la mesa! — grito dando un golpe con la escoba a la cabeza del híbrido