Wolfgang.

Capitulo 4

El resto de la cena la pasaron entre pláticas amenas y conversaciones que los llevaron a conocerse cada vez mas. Jisung por otro lado se había mantenido como observador y oyente, solo ponía atención a las partes interesantes y la única razón por la que no se levantaba de la mesa era porque analizaba a cada uno. El era bueno juzgando a la gente, tampoco era de confiar fácilmente y había algo en esos alfas que lo dejaban inquieto.

Se perdió un poco en las facciones de Minho. No escuchaba sobre qué estaba hablando pero la ligera sonrisa en su rostro al hablar le indicaba que estaba feliz de hablar de ello, sus ojos miel mostraban un pequeño brillo y la forma en la que sus labios se juntaban y separaban al hablar eran hipnotizantes. No se había dado cuenta que observaba tan fijamente al alfa hasta que sus miradas se encontraron, sintió su corazón alborotarse y su respiración acelerarse un poco a causa de haber sido descubierto, así que solo apartó la mirada sintiendo la del mayor taladrar su costado, cosa que Jisung ignoro.

–Es impresionante –fue lo único que escucho con claridad sobre su conversación. Chan se dirigió al más joven de todos –¿Jeongin, te gustaría ir a los entrenamientos que dan los chicos por las mañanas?

–Ehm no lo sé, yo... –la voz del omega dudosa, busco la mirada de sus hermanos. Hyunjin observaba disimuladamente al rubio, quien parecía estar ignorándolo por completo y Minho seguía fijamente al gemelo del otro con su mirada, sin poner atención a los dicho por el líder de la manada. Jeongin regresó su mirada a los demás sin saber qué decir.

No sabía cómo se había dado la conversación pero de repente Minho habla sobre la habilidad de Jeongin en defensa personal, él había sido entrenando al igual que sus hermanos desde muy joven sobre todo después del incidente que tuvieron con aquel lobo pícaro que lo atacó años atrás. Ahora él era el centro de atención y no podía evitar sentirse incómodo con las miradas de todos sobre él. Changbin le sonreía incitandolo a decir que si, mientras Seungmin comía tranquilamente pendiente de lo que diría el menor.

–A Jisung y a Felix les encantaría tenerte ahí ¿verdad? –insistió el alfa mayor con una sonrisa simpática que contagió al omega. Felix estuvo de acuerdo de tener a más omegas en sus clases de entrenamiento.

–Claro –asintió Felix, sin mirar ni una vez al alfa pelinegro, consiguiendo que este regresara su atención a la conversación.

–Si, no hay problema. Mientras más de nosotros seamos mejor –lo animó Jisung. A pesar de no haber escuchado por completo la atención a su plática parecía que tenía que ver con el omega más joven y Jisung, no entendía porque pero el chico le agradaba demasiado, a diferencia de sus dos hermanos mayores.

Seguramente es porque entre omegas se apoyan y si en algo creía fielmente era en el poder que su casta tenía. Los omegas eran tan capaces como los alfas en todo, podían luchar, liderar, trabajar muy duro, no había límite para nadie mientras creyeran en sí mismos.

–Okey iré –aceptó finalmente sonriendo de vuelta.

–Oh, eres tan adorable –adoro Changbin encantado con lo lindo que era el omega desde que lo conoció.

En cuanto escuchó eso venir del beta, Hyunjin lo fulminó con la mirada, apartando por fin su atención de Felix.

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