Un cafe, por favor #guapoduo

Capitulo 6

Cellbit había abierto la puerta de su dormitorio al escuchar que tocaban. Roier lo esperaba detrás de ella con una sonrisa en su rostro. Cellbit se quedó pegado un rato viendo como estaba vestido el menor, se avergonzó de ello y dejo pasar al moreno, le encantaba ver como se había preparado solo para ver películas con el.

Roier estaba estupefacto al ver lo grande que era la habitación del castaño, otra sorpresa fue ver velas y un proyector de películas, había también un sillón adornado con cojines y frazadas. Roier por un momento pensó que de verdad Cellbit se lo quería coger con todo lo que le tenía preparado, tal vez esa sería la sorpresa que le tenía el castaño.

– ¿Estás bien? – preguntó Cellbit al acercarse al menor. Roier se giró para verlo. Le gustaba ver los ojos de Cellbit, eran azules pero no cualquier azul, era uno intenso que producía algo en el moreno al verlos.

– Y cual es mi sorpresa – Cuestiono algo nervioso.

– ¡Compré tacos! - Comentó Cellbit emocionado.

Roier se sintió culpable al tener esos pensamientos pendejos.

– ¡Qué rico! – Roier se acercó al proyecto que yacía en el piso – Estas bien preparado he Cellbit –

– Cositas, ya sabes – Alardeo Cellbit

– Pendejo – Susurro

Buscaron películas por internet pero todas las que el moreno elegía el castaño colocaba una excusa.

– Es el conjuro Cellbit – Reclamaba Roier.

– Aburrida –

– Tu culo pendejo – Cellbit río. Pensaba que película le podría llamar la atención al moreno – Veamos Rec – Soltó Cellbit – Es española – Agregó.

– Mmm me gusta coño – Roier imitaba el acento español, Cellbit reía mientras buscaba la película.

Sacaron la comida y se dispusieron a ver la película.

Algunas gotas de lluvia golpeaban la ventana de la habitación. Cellbit había cerrado la ventana cuando noto que llovía para que las velas no se apagaran.

Ya habían pasado algunas horas, los ojos de Cellbit se sentían pesados, pensaba que había sido mala idea llamar a forever para que trajera más cosas para comer. Giró su cabeza hacia Roier y lo observó unos segundos, este no parecía percatarse de la mirada del castaño ya que solo se dedicaba a observar lo que se estaba proyectando en la pared.

– Pareces cansado – Sugurio Roier mientras se volteaba a ver al castaño – Pareces un zombi – agregó para seguir comiendo golosinas. Cellbit coló su mano sobre la de Roier y la fue bajando lentamente para que moreno no metiera más golosinas en su boca

– Ya no comas eso – murmuró cansado –  Te vas a ir por el baño pendejo – Sonrió burlesco el castaño.

Roier río cuando escucho el "Pendejo" que había pronunciado Cellbit con su acento portugués.

– No sería la primera vez y menos será la última – Tiro una golosina a su boca y miró atentamente a Cellbit mientras masticaba la gomita. Cellbit enarco una ceja divertido, no se dió cuenta que en su rostro se dibuja una sonrisa.

– Deben de ser como las dos de la mañana – Murmuro cansado Cellbit.

– ¿Me estás echando? – Preguntó Roier haciéndose el ofendido y colocando su mano en el pecho.

– Claro que no, guapito – Rio Cellbit – ¿No te ibas a quedar a dormir? – Pregunto confuso el castaño.

La conversación que había tenido en la mañana con su amigo Mariana cruzo por su mente. Se levantó del sillon y se coloco su chaqueta.