Capitulo 13

1.2K 113 25
                                    

Roier abrió sus ojos cuidadosamente para que la luz que se filtraba por la ventana no le dañara, pero falló rotundamente y volvió a serrar sus ojos apretandolos para no notar la luz, seguiría durmiendo de no ser porque unos dedo fríos comenzaron a recorrer sus pómulos y parte de sus nariz.

Nuevamente abrió sus ojos para encontrarse con unos celeste intensos que lo miraban. Cellbit al verse descubierto separó rápidamente sus dedos del rostro de Roier y se paró de la camilla como si esta le estuviera quemando. A Roier le vino un escalofrío al no sentir el cuerpo de Cellbit junto al suyo.

- Lo siento - Se disculpó apenado el castaño.

- ¿Me has besado y te da vergüenza que te haya visto como me hacías cariño mientras duermo? - Roier se cruzó de brazos divertido por la reacción del castaño - Como eres pendejo Cellbit -

- Cállate - Dijo avergonzado el castaño - Si lo pones de esa forma suena como si fuera un psicópata -

- No porfavor, con un sociópata ya estoy bien, no quiero un psicópata ahora - Roier río pero un dolor lo interrumpió e hizo una mueca que fue notada por Cellbit.

- No te muevas mucho - Cellbit se acercó a Rapier y le extendió una mano para que se acomoda bien.

- ¿Sabes algo de Mariana y River? - Acepto la mano del castaño y se acomodo.

- Los golpes de Rivers están mejorando y Mariana despertó hoy en la mañana - Respondió Cellbit acomodando la almohada.

Roier tocó con cuidado su cuello y cerró sus ojos.

- Todo es mi culpa, están en peligro por mi - Susurro Roier.

- No digas eso Roier, el culpable de todo esto es Spreen - Cellbit acercó una silla y se sentó al lado de la camilla - Está loco y esas con las cosas que hace la gente loca -

- Logró encontrarme, de seguro tiene ojos por todos lados, no parará hasta tenerme creeme que cuando se propone algo lo cumple al pie de la letra -

- Sobre eso... Hable con Mariana esta mañana - Un leve sonrojo apareció en las mejillas del
castaño - Está de acuerdo en que te mudes a mi habitación por ahora, obviamente si tu quieres y no tienes problemas con ello - Dijo rápidamente Cellbit.

Roier río al ver lo nervioso que estaba Cellbit, colocó su mano en la pierna del castaño para tranquilizarlo un poco.

- Me parece bien, ahora... ¿Me podrías llevar a la habitación dónde está Mariana? - Preguntó el moreno.

- Claro - Cellbit se levantó en busca de una silla de ruedas.

Ya con la silla en manos sentó a Roier y comenzó a empujarlo en dirección a la habitación de Mariana. Roier jugaba con los dedos de sus manos, suplicaba que su amigo no estuviera tan herido.

Cellbit tocó la puerta y una voz le indicó que podían pasar, giró la manija y abrió la puerta dejando ver al de lenges acostado en una camilla con agujas en sus brazos y vendas en su cabeza. Mariana les sonrió al notar la presencia de sus amigos y se sentó en su cama. Cellbit dejó a Roier al lado de la camilla y se sentó en una esquina para darles espacio.

- Te ves horrible - Hablo Marian, Roier soltó una pequeña risita.

- No eres el más indicado para decirme eso - La sonrisa de Roier desapareció y una expresión de enojo y tristeza se mostró en su rostro - ¿Que paso wey? - Pregunto.

- Estábamos en la fiesta y nos chavos llegaron así emputados y nos empezaron a golpear, Rivers les tiro unas botellas y sillas pero eran así muchos
mien - Se frotó suavemente su cabeza con su mano - No nos dió tiempo a reaccionar. Pero loco, te juro que si no hubieran llegado por atrás les hubiéramos metido una verguiza -

Un cafe, por favor #guapoduo  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora