VII

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Suspiré en el balcón mientras veía cómo la noche poco a poco llegaba

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Suspiré en el balcón mientras veía cómo la noche poco a poco llegaba.

Ayer estaba completamente cansada y me quedé dormida todo el día, por eso ahora no tengo ningún tipo de cansancio. Realmente odiaba quedarme agotada después de usar tanta magia.

—En verdad odio estar en este lugar —murmuré para mí misma.

Dejé de lamentarme y regresé a la cama, cerrando las puertas que daban al balcón. Ahora solo sobreviviría con tranquilidad y tendría que esperar hasta otro evento importante de la historia, protegiendo a Athanasia, hasta llegar al final y así finalmente todas tendrían su final feliz. Mientras tanto, yo me iría y viviría tranquilamente en el campo con montañas de dinero y libros.

Me pude imaginar ese futuro y realmente quería cumplirlo. Anhelaba con todo mi ser no tener que cargar con todo un pueblo sobre mis hombros. No quería ser la heredera al trono...

...

—La princesa Athanasia se mudará al Palacio Esmeralda, princesa—por poco escupí el té, sabía que me olvidaba de eso. Athanasia se mudaría a este palacio.

—Bien, es momento de seguir más encerrada —sonreí. La habitación quedaba muy lejos de donde ella estaría, así que no creo que encuentre mi habitación.

Eso era lo que esperaba, Athanasia viviría en el Palacio Esmeralda. Estaba algo estresada; tenía miedo de que alguien se encontrara con ella, además de los demás sirvientes.

—Gabriel, trae a Jazmín —ordené.

Cuando regresó, ya estaban los dos y tenía que dar nuevas indicaciones.

—Primero, Jazmín, trata de no resaltar tanto entre las sirvientas. Supongo que la persona que cuida a Athanasia también vendrá al palacio y sería mejor que no establecieras una relación con ella... —me sentía como una pésima persona al prohibirle hacer amigas en el palacio—. No quiero prohibírtelo, pero...—

—Princesa, entiendo. No es necesario que se preocupe por cómo me siento —me dio una sonrisa leve que me hizo confiar más en ella.

—Bien... Gabriel, vigílame como siempre. Aunque ahora el señor Félix vendrá más seguido por este lugar, solo actúa como siempre, pero mantente al tanto por si alguien está cerca de los pasillos que te traen a esta habitación —asintió. El trabajo de Gabriel no era tan difícil en comparación con el de Jazmín, quien estaría más cerca de las demás sirvientas.

—Gracias... —terminé, aunque no pude evitar sentir un nudo en el estómago. La llegada de Athanasia podría implicar que me conociera y la historia llegase a cambiar, tendría que mantenerme lo mas alejada posible.

...

Saque el libro del escritorio donde anotaba los hechos que recordaba, prácticamente ya había escrito todo lo importante hasta ahora.

𝒉𝒊𝒋𝒂 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒄𝒐𝒏𝒄𝒖𝒃𝒊𝒏𝒂 𝒐𝒍𝒗𝒊𝒅𝒂𝒅a/Princesa Encantadora/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora