VIII

802 91 2
                                    

Unos cuantos años pasaron hasta esta fecha

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Unos cuantos años pasaron hasta esta fecha

Mi cumpleaños

Mis 15 años llegaron como cualquier otro día, y solía disfrutarlos. Agradezco el hecho de no tener a mucha gente a mi alrededor aparte de Gabriel y Jazmín. Al levantarme, Gabriel me recibió con sus felicitaciones.

—Princesa, felicidades. Ya tiene 15 años —dijo con un toque de gracia. A veces, extrañaba al chico de 16 años que solía ser, el que solía desearme feliz cumpleaños de forma sarcastica.

—Buenos días, princesa —añadió con una sonrisa arrogante— Tiene 6 años menos para alcanzar la vejez.

Su falta de respeto hacia mí me irritaba pero era divertido, así que decidí quedarme con el actual Gabriel. A pesar de que podía extrañar al antiguo, no deseaba que volviera. Agradecí su felicitación con un abrazo, tratando de mantenerme serena a pesar de su comentario. 

La verdad soy muy fan de este día, ya que como y recibo unos cuantos regalos como cualquier persona.

—Bueno, Gabriel, déjame disfrutar mi día como una princesa perezosa.

Así es, disfrutaba mi cumpleaños siendo perezosa. Pasaba todo el día en mi cama, esperando pacientemente mi desayuno mientras leía uno de los libros de historia de este país, los leía varias veces y no me aburría, algo que no podía negar eran interesantes.

Llegó la tarde y fui felicitada por Jazmín, quien me trajo unos platos deliciosos de comida y un pastel de frutas riquísimo. Me levanté de mi cama y fui al balcón para sentir un poco de aire fresco. Estos días eran muy felices. Oí la puerta abrirse.

—Gabriel, ¿vamos a recoger flores? —dije con alegría, pero al darme vuelta, me encontré con otro rostro. No sé por qué, pero sentí que esto era como un déjà vu.

—Oh, su majestad —hice una reverencia.

—Arréglenla y llévenla al lugar que les dije —ordenó Claude antes de salir de la habitación.

—¿Qué acaba de suceder? —pregunté para mí misma, y de repente un grupo de sirvientas entró en mi habitación, ninguna de las cuales conocía.

—¿Qué está pasando? —exclamé. Dos sirvientas me sujetaron de los hombros y me llevaron al cuarto de baño.

Fui llevada a la bañera, donde mi cuerpo fue suavemente tallado y perfumado con aromas dulces y relajantes. Me permitieron descansar un rato mientras mi cabello era cuidadosamente lavado. Al salir del baño, me ayudaron a ponerme un vestido hermoso, tan deslumbrante que ni siquiera podía describirlo con palabras. Sabía que era increíblemente hermoso. Por un momento, casi olvidé cuestionar por qué estaba pasando todo esto.

Me agregaron un poco de maquillaje y me hicieron un peinado elegante y hermoso. Rápidamente fui escoltada hasta donde se encontraba Claude. Con cada paso, mi corazón latía con fuerza en mi pecho, lleno de angustia y nerviosismo no sabia lo que estaba pasando.

𝒉𝒊𝒋𝒂 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒄𝒐𝒏𝒄𝒖𝒃𝒊𝒏𝒂 𝒐𝒍𝒗𝒊𝒅𝒂𝒅a/Princesa Encantadora/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora