la situación en la que nos encontrábamos ahora no era la mejor, estábamos teniendo ciertas indiferencias con un grupo de personas, lo que no sabía era que, entre esas personas, mi haerin estaba ahí, viendo desde lejos, opinando de vez en cuando. pero si ella sabía que yo estaba ahí, porque lo sabía, era muy claro, ¿por qué no hablarme? ¿por qué no contactarme? ¿qué de lo impedía? ¿tenía a alguien más?
luego del alboroto, nos dimos cuenta de que era ella, tenía otro nombre, imposible dar con ella, no estaba del todo segura de si era ella pero deseaba que así fuera, cuando me había armado de valor, cuando iba a ir por mi explicación, cuando le iba a volver a declarar mi amor por ella, desapareció.