Capítulo 1: Floraria

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Cuenta la leyenda que el dios de la luz Raikiru con su inmenso poder desprendió una luz tan brillante que creo toda una tierra donde cambian muchas naciones. Entre ellas el reino de las flores.

Vemos al rey Hideaki hablando con sus recaudores.

—Hasta ahora la producción en los campos va bien, todos pudieron pagar sus impuestos sin problemas—dijo el recaudor.

—Bien, que todo siga así, y diles a los campesinos que lo que necesiten no duden en decirlo—dijo el rey, le tenía mucho respetos a sus súbditos sin importar su estatus social.

—A si, hablando de eso, me encomendaron hacerle la petición de contar con algún doctor cerca de sus comunidades—

—Esta bien, saliendo de aquí ve con el consejo de médicos y solicita algunos, cuando hagas eso hablarás con el jefe de constructores para que construyan una casa donde pueda atender y vivr—

—A la orden mi señor—

—Puedes retirarte—

El recaudador se retira del castillo.

En eso alguien entra a la sala real.

—¿Me mandaste a llamar padre?—dijo cierta ojimorada con cabello negro y puntas moradas.

—Ah Shinobu mi bella hija, ven dame un abrazo—dijo Hideaki al verla.

Se abrazan.

—Te mandé a llamar, para tu regalo de bodas, ¿Qué te gustaría?—

Shinobu da una leve risa—padre no necesito nada, ya has hecho mucho por mi—termino con una sonrisa.

—Lo se, pero la felicidad de mis hijas no tiene precio—

En todos los reinos, a excepción del reino del amor, solo un varón podía heredar el trono, pero al parecer el reino de las flores se quedaría sin rey puesto que Hideaki solo tuvo mujeres, su hija mayor la princesa Kanae de 24 años que se casó con el rey Sanemi, la princesa Shinobu de 21 años que dentro de poco se casará con el rey Giyu y la princesa Kanao de 19 años.

Debido a su situación empezó a buscar marido para sus hijas, pero Hideaki a diferencia de otros reyes está en contra de casarlas por intereses políticos, prefería verlas felices con el hombre que amaban aún si fuera un campesino, pero sus hijas se enamoraron de los reyes de ventaria y aquaria y ellos correspondieron, así que tuvo el buen visto de su padre, y esto le favoreció en apoyo de los otros reinos, aunque en Floraria  eran muy valientes, eran el reino más débil, por lo que terminó siendo benefico para el reino.

Las princesas eran muy respetadas en el reino, no solo por ser buenas y justas con el pueblo, si no porque las 3 eran unas bravas guerreras que lideraban el ejército.

—Con que estés ahí es suficiente—dijo la joven ojimorada.

—Entonces te daré varios regalos—dijo el amable rey.

—Ay padre—dió una leve risa la ojimorada.

—¿No es mejor que te concentres en la calidad de vida de los obreros?—

—Ya lo hago, hace un momento atendí una petición suya y debido a que han trabajado tan bien se ha generado lo suficiente para aumentarles su salario, más tarde me reuniré con los recaudadores para que les den la noticia—

—Siempre tan generoso—

—¿Puedo retirarme?—pregunto la pelinegra con puntas moradas.

—Claro—contesto el viejo rey.

En cuanto Shinobu se va en el pasillo se encuentra a Kanao.

—Hermanita—dijo la ojimorada antes de abrazar a su pequeña hermana.

Mi Lady (Tanjikana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora