"Minho, te quedan 6 meses de vida".
La nieve se derretirá, las flores florecerán. El frío del invierno siempre cambiará con el calor de la primavera.
Al menos eso es lo que Minho creía... hasta hace un segundo.
- Ship Principal: MinChan
- Chico x Ch...
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"Hyu... H-hyung l-lo siento... lo siento... d-duele mucho... no me pegues... l-lo siento.."
Minho, que sabía que estaba siendo utilizado como una vía de escape para las emociones de Chan, sólo podía seguir llorando de dolor y temblando de miedo mientras sus ojos se veían obligados a mirar fijamente al par de ojos que se habían vuelto fríos. Este lado de Chan, se sentía como si pudiera hacer que Minho muriera antes.
"¿Who says you can leave so easily? Todavía necesito mi objeto de desahogo aquí, Minho. Te lo dije, te extraño, ¿verdad?"
La mano izquierda de Chan seguía tirando del pelo de Minho, mientras que la derecha secaba las lágrimas del chico que tenía en su regazo.
"Dulce".
"Hyung... no me pegues otra vez... lo siento..." El cuerpo de Minho seguía tenso y tembloroso por el miedo a que Chan volviera a lanzarle las manos encima. "Me duele la cabeza..."
Chan miró fríamente a los dos ojos llorosos y suplicando clemencia durante un buen rato: "No tienes que seguir moviéndote, Minho. Me despertarás".
Minho miró confundido a la persona que tenía delante, se dio cuenta de que había algo duro ahí abajo.
"Hyung, no quise hacer..."
Chan siguió mirando a la persona en su regazo durante mucho tiempo, soltando lentamente su mano que estaba el pelo de Minho.
"Quítate los pantalones para mí."
"Hyung..."
"Now".
Minho sacudió ligeramente la cabeza y enterró su cara de nuevo en el amplio pecho de Chan, aún sentía dolor de la paliza, no podía imaginar lo débil que se sentiría si hiciera eso.
"Deja de esconderte o quieres que me vuelva a emocionar, Minho. ¿Quieres que te pegue otra vez?" Chan miró fríamente al hombre su regazo, haciendo que Minho volviera a estremecerse de miedo.
Minho se limitó a abrazar a Chan y a seguir negando con la cabeza, haciendo que el temperamento de Chan volviera a subir. Al final, un emocionado Chan dejó la colilla y empujó a la persona que tenía en su regazo, haciendo que se golpeara contra el escritorio que tenía delante.
"¡Argh! Hyung, duele..." Minho, que ya estaba flácido, sólo pudo gemir de dolor mientras le quitaban los pantalones a la fuerza.
