𝐒𝐇𝐀𝐌𝐄𝐋𝐄𝐒𝐒───𝐇𝐚𝐰𝐤𝐬

005 | Rubia Explosiva

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Estuvo sentada por unos segundos sola en una roca, mientras esperaba a que los demás llegaran. Por un momento pensó que quizás fueron atrapados y debería buscarlos, sobre todo el tipo que se multiplica, ya que puede serle útil en un futuro.

— ¡Oh, mira!, ¡Kitsune-chan!, ¡Kitsune-chan! —sintió una vena asomarse en su frente al escuchar ese apodo.

Ya van tres personas que la llaman de ese modo amistoso.

— Puedes callarte, estoy justo aquí —farfulló Sakura irritada. Twice se acercó frente a ella junto con Dabi.

— ¡Nadie me dice que hacer!. ¡Okey! —levantó su pulgar. La mujer de ojos rojos frunció sus cejas por su actitud bipolar. Sabe que se debe a un trauma que él señaló, más no lo contó por completo. Y francamente, a ella no le interesa.

— ¿Qué sucedió con el Nomu?.

— Intenté encontrar la ubicación del rubio, pero me estuve entreteniendo y preguntándole a una mocosa astuta —espetó mientras sostenía su pierna derecha—. Al final, la lastimé, por lo menos envié a ese Nomu para que lo hiriera de gravedad.

— Eso no responde a mi pregunta. ¿Por qué no lo llamaste de vuelta, idiota?.

— El único idiota aquí eres tú, por confiar en mí —dijo mientras con su uña limpiaba sus colmillos.

— ¿Eh?, ¿No hay nadie más aquí? —cuestionó Toga sonriente, apareciendo por los árboles y un tanto lastimada de el rostro.

— Lunática, ¿Conseguiste la sangre?, ¿De cuántas personas?.

— Una persona.

— Tch... —escupió Sakura.

— ¡¿Solo una?! —exclamó Twice—. ¡¿No te dijeron que al menos consiguieras de tres?!.

— No lo pude evitar. Creí que me matarían —replicó Toga sin borrar su sonrisa.

— Aún así... ¿Toga-chan, no estás muy feliz? —volvió el Twice serio—. ¿No hubo nada que te deprimiera?.

Toga como si le hubiesen dado una caja de chocolates, suspiró y sostuvo sus mejillas sonriente, con un ligero rubor en estas.

— ¡Hice algunas nuevas amigas!, ¡Y conocí a un chico en el que estoy interesada!.

— ¡¿Te refieres a mí?!, ¡Lo siento no puedo!. ¡Tu también me gustas!.

Sakura frunció sus cejas observando a los dos. Era lo que menos soportaba de unas personas, que sean ruidosas e intolerables. Debía de mantener la calma.

— Son unos ruidosos. Cállense... —murmuró Dabi igual de harto.

La pelirroja, como un Zorro, también tenía sus sentidos desarrollados, por lo que escuchó a lo lejos unos gritos, y venían del cielo, poco a poco se acercaban.

— ¡¡Apártense!! —exclamó alejándose de dónde venía el impacto.

En lo que avisó y todos se alejaron, lo que cayó, fue un grupo de personas. Tres específicamente aplastando a una. Un muchacho de cabellos verdes oscuros, con heridas en sus brazos y su rostro, parecía muy débil pero era quien aplastaba a Compress por la espalda. El segundo era un tanto deforme, sus extremidades parecían alas y tenía ojos al final de estas. Y por último, uno binario, su cabello era blanco y rojo granate, y sus ojos grises y turquesas.